"Llamé en 2007 dos o tres veces por teléfono a mi amigo Pepote Ballester (director general de Deportes del Govern) para mediar entre él y mi amigo Diego Torres, para que el Govern pagara al Instituto Nóos 400.000 euros que quedaban pendientes del II Illes Balears Forum (un foro turismo-deporte)", admitió ayer Iñaki Urdangarin al juez José Castro. En 2006 su suegro, el Rey Juan Carlos, había ordenado al duque que abandonara Nóos, los negocios con Diego Torres y los convenios con Administraciones públicas.

Ballester, imputado en la pieza separada 25 del caso Palma Arena y que ha decidido pactar con Anticorrupción para atenuar su posible condena, explicó el pasado diciembre que su amigo Urdangarin le "llamó entre 5 y 8 veces en los primeros meses del 2007 para exigirme que la fundación Illesport (dirigida por él) pagara al Instituto Nóos la cantidad pendiente del II Illes Balears Forum".

La versión dada por Pepote, defendido por Ángel Aragón y Juan Piña, apunta a que el duque de Palma no se había desvinculado del Instituto Nóos, pese a su dimisión como presidente de esa entidad en junio del 2006, porque reclamaba un dinero para sí.

Urdangarin mantuvo ayer que sí se desvinculó del Instituto Nóos, que cobró 2,3 millones del Govern de Matas por organizar en Palma los dos Illes Balears Forum entre 2005 y 2007. "Yo no estaba satisfecho con el trabajo del Instituto Nóos en 2006, no había realizado todos los servicios que se habían comprometido (en el segundo convenio firmado con Illesport) y así se lo dije a Urdangarin", dijo Ballester. El exalto cargo del Govern asegura que el instituto sin ánimo de lucro impulsado por el duque no había realizado tareas como un Plan Estratégico sobre el Turismo en Balears o el Observatorio Permanente sobre el Deporte y el Turismo. "Urdangarin me replicó que pagara el dinero al Instituto Nóos y que, luego, Diego Torres haría el trabajo no terminado".

"Yo no tuve nada que ver con el II Illes Balears Forum, pero en 2007, Diego Torres me pidió que mediara entre el Instituto Nóos y el Govern para que el segundo le abonara los 400.000 euros pendientes porque, en caso contrario, peligraba la viabilidad del instituto", afirmó ayer el duque.

Pepote Ballester añadió que, a raíz de su negativa a abonar los 400.000 euros, su íntimo amigo se distanció de él: "Se enfadó conmigo y rompió las relaciones". El yerno del Rey negó ante el juez haberse enemistado con Ballester, un ex deportista de élite como él con quien había compartido muchos momentos de su vida entre 1984 y 2007, pero admitió que "desde entonces ya no me hablo con él". Según Urdangarin, fue Ballester el que se apartó de él.

El imputado fue interrogado por el magistrado Castro acerca de sus colaboradores y trabajadores. Iñaki Urdangarin manifestó que "nunca" había tenido empleados ilegales o "simulados", para que aparentaran realizar alguna tarea. El instructor se interesó por la tarea que hacían sus sobrinos y su hermano para Nóos. El duque de Palma admitió que algunos de sus colaboradores se dedicaban a recopilar información en Internet, datos que luego eran "procesados" por los consultores del grupo.