Tras la concentración del pasado martes (y el corte del tráfico durante diez minutos en las Avingudes), se siguen sucediendo en la isla las muestras de rechazo a las cargas policiales acaecidas en Valencia. Ayer se hizo público que el Parlament hará una declaración institucional sobre estos hechos, ya que la Junta de Portavoces ha aceptado la propuesta del Grupo Socialista. La idea original ha partido de las Juventudes Socialistas, que quieren que la cámara condene el uso de la violencia que se ha podido ver estos últimos días en las manifestaciones estudiantiles valencianas. El texto se presentará en la próxima sesión plenaria. Por otro lado, la Assemblea de la Comunitat Universitària y el Sindicat dels Païssos Catalans organizaron y protagonizaron una protesta frente a la librería del campus. Los universitarios acabaron trasladando su reivindicación frente a Son Lledó, donde pidieron al rectorado que condene de forma oficial la actuación de la policía de la Comunitat Valenciana. Estudiantes de algunos institutos también llevaron a cabo pequeñas concentraciones para expresar su solidaridad con sus compañeros valencianos. Las asociaciones de padres y madres de alumnos también criticaron la "brutal actuación" de la policía de Valencia. En el comunicado emitido por la confederación de APAS, COAPA expresó su solidaridad con los alumnos, familias y profesores de la Comunidad Valenciana, donde según indicaron, "los centros están en una situación muy parecida a la nuestra, con grandes carencias de fondos económicos para garantizar el suministro básico". COAPA se suma a la petición de la dimisión de la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana.