La diputada autonómica del PP Ana Aguiló está muy indignada con la protesta contra el presidente Bauzá en plena revetla de Sant Antoni en sa Pobla. La parlamentaria –que despunta como una de las nuevas promesas de la bancada ´popular´– hizo una amplia cobertura informativa de los hechos: "Extremistas catalanistas no aceptan el programa electoral que ha votado la mayoría de los ciudadanos de les Illes Balears y gritan en sa Pobla", divulgó mientras unos 150 jóvenes poblers gritaban e insultaban a Bauzá a su llegada a la plaza consistorial.
Tras lamentarse de que "en el siglo XXI todavía algunos utilizan la barbarie contra políticos que simplemente están aplicando su programa electoral", explicó: "Yo no estaba de acuerdo con la política del señor Antich, pero nunca fui a gritarle, utilicé siempre las normas democráticas". Total, que para Aguiló, que es la portavoz de Educación del grupo parlamentario del PP, "després del que va passar ahir a sa Pobla de cada vegada és més necessari un canvi de sistema educatiu. Respete, tolerància".
Ya puede tomar nota el conseller de Educación, Rafel Bosch, que ayer viajó a Madrid como un pasajero más en la low cost Ryanair, de la que recela su compañero Delgado. Por cierto que Bosch se lo pasó en grande el martes en las beneïdes de Muro, donde comentó la jugada con el vicepresidente del Consell, Joan Rotger. Ambos son contrarios a demonizar el catalán, pero acatan la doctrina oficial como buenos alumnos disciplinados. No están los tiempos para experimentos raros.
Font se relame de gusto
El que vibró como nunca por Sant Antoni fue Jaume Font, al ver cómo recibía su pueblo –el mismo que le dio la espalda y prefirió tener de alcalde a su antiguo delfín– a su exjefe Bauzá. Font había movido los hilos por detrás, y algo tuvo que ver con el griterío al presidente. "¡Es hoy que tenéis que protestar, vosotros que sois jóvenes!", arengó a unos fans.
En el hospital de Inca el PSOE no puede dar ruedas de prensa
El concejal del PSOE de Inca y exsenador Xavier Ramis no pudo celebrar ayer una rueda de prensa a las puertas del hospital de Inca, en protesta por los recortes, y tuvo que desplazarla a la parada de autobús en una rotonda. Según Ramis, todo por orden de Bestard.
