María Umbert, exprimera directora general de IB3 y jefa de Gabinete del president Jaume Matas entre julio del 2003 y marzo del 2004, puso ayer especial énfasis en corregir ante la sección primera de la Audiencia su declaración con el juez Castro. "Me equivoqué al decir que, con la factura de agosto del 2003, se pagó al señor Alemany por sus primeros discursos, entre los que reseñé el de la sesión de investidura; ese no estaba incluido, sí que se le pagó por el de la toma de posesión del nuevo Govern", matizó la también expresidenta territorial del Insalud, cuando este dependía de Madrid.

La rectificación vino a cuento de que anticorrupción acusa a Umbert de pagar al periodista con fondos públicos por un discurso redactado para Matas cuando éste todavía no era president del Govern.

Umbert lo pasó ayer muy mal ante el trabajo de las decenas de redactores gráficos acreditados para el juicio. La periodista, instintivamente, trató de cubrirse el rostro con la cabellera y agachando la cabeza.

La imputada, defendida por Josep Zaforteza, alabó la calidad de Alemany como redactor: "Yo hacía discursos ordinarios para Matas y también los hacía Joan Martorell y la gente de mi equipo (los periodistas del gabinete de prensa de Presidencia), pero nos sentíamos incapaces de redactar los discursos con el calado político y cultural y la calidad del pensamiento de Antonio Alemany". Respecto a la contratación de Alemany, la acusada explicó que negoció, por orden de Matas, con el empresario y periodista las remuneraciones por sus discursos. "Alemany me dijo que no le convenía colaborar, mediante un contrato, con el Gabinete de Presidencia porque él ya trabajaba en otros medios de comunicación y no quería estar en un despacho; lo vi entusiasmado con el señor Matas y muy conectado con él (...) Creo que le pagué a precios de mercado".