El PSIB-PSOE ha pedido hoy al Govern que retire su proyecto de Ley General Turística (LGT) porque supone la "desregularización urbanística" en Baleares, está hecha para "unos pocos", supondrá la pérdida de empleos y advierte de que puede ser inconstitucional al asumir competencias de ayuntamientos y consells insulars.

El texto "olvida" el interés general, prima intereses "muy particulares" de grandes cadenas hoteleras y lo "más grave" es que será "más fácil" cerrar un hotel y reconvertirlo en viviendas particulares para venderlas que renovarlo.

Así de contundente se ha mostrado la portavoz socialista en el Parlament, Francina Armengol, respecto de uno de los principales proyectos del Ejecutivo de José Ramón Bauzá, a quien le ha "cogido el guante" y le ha pedido que cumpla con su compromiso adquirido hace unos días en el Parlament de llegar a acuerdos con la oposición.

Los socialistas han propuesto al Govern que redacte un nuevo texto con los agentes sociales y económicos de las islas -"no solo con unos pocos"-, las instituciones públicas y los partidos políticos.

Si el Govern inicia finalmente la tramitación del actual proyecto en el Parlament, el principal partido de la oposición presentará enmiendas a la totalidad y parciales para evitar que salga adelante una ley que "significa volver atrás mucho años" y que "imposibilita la rehabilitación real de las zonas turísticas", ha advertido Armengol.

La portavoz socialista ha estado acompañada en la rueda de prensa que ha ofrecido para dar la opinión de los socialistas sobre esta futura ley por los diputados Jaume Carbonero y Joana Barceló, que ha denunciado que la ley no respeta ni las competencias de urbanismo ni turismo de consistorios y consells, lo que "tiene un difícil encaje constitucional".

Se trata de un "ataque frontal" a la autonomía municipal, ha declarado Barceló, que se ha mostrado contraria a la "sustracción de competencias" a los ayuntamientos y consells.

Por su parte, Carbonero ha llegado a decir que algunos artículos "parecen hechos a medidas con una técnica jurídica muy baja" y han sido redactados para "resolver problemáticas personales".

En este sentido, el exconseller de Obras Públicas ha criticado que cualquier arquitecto, ingeniero o "artista" de reconocido prestigio podrá realizar un proyecto sin necesidad de respetar la actual normativa turística, lo que ha rechazado de plano porque algunos de estos profesionales también pueden hacer "pifias".

Los socialistas se han mostrado totalmente contrarios a la figura del cambio de uso de hotelero a residencial, lo que en su opinión favorecerá la especulación urbanística de la que se beneficiarán "unos cuantos", al tiempo que Armengol ha advertido de que el "gran olvidado" en este proyecto es la oferta complementaria, de la que viven muchísimas familias en el archipiélago.

Tampoco tiene en cuenta a los empleados del sector, que se verán perjudicados con su aplicación por la pérdida de puestos de trabajo, ha vaticinado Armengol.

"Es una ley -ha aseverado- que va en contra de la economía de las Islas Baleares y del territorio y del turismo de calidad; por tanto va en contra del futuro y del presente de nuestras islas, por lo que pedimos su retirada inmediata" para que seguidamente el Ejecutivo balear inicie una redacción negociada.

Tan solo de este modo, ha añadido la portavoz del PSIB, el Govern demostraría su capacidad de diálogo y de trabajar por el futuro de la Comunidad Autónoma.