La posibilidad de cerrar el campus en los periodos de vacaciones, como ya se ha hecho en otras universidades españolas como la Complutense de Madrid, también se ha puesto sobre la mesa como medida de ahorro. Desde el STEI-i se desaprueba esta medida al considerar que supondrá un "ahorro insignificante" en gastos de personal y de consumo energético. La UIB ya ha tomado medidas en esta línea. A principio de curso la institución académica ya avisó a de que las bibliotecas permanecerían cerradas los fines de semana, una iniciativa que fue muy criticada entre los estudiantes.
La Assemblea de la Comunitat Universitaria publicó ayer en su blog que finalmente las bibliotecas del edificio Ramon Llull y del Jovellanos sí abrirán los fines de semana en periodo de exámenes. Se abrirán dos aulas más en el Mateu Orfila y en Anselm Turmeda.
