La asamblea de la comunidad universitaria de la UIB, que se proclama como un espacio participativo y democrático abierto a la participación de todos los estudiantes, personal docente e investigador y administrativo de la universidad, decidió ayer convocar una huelga para el próximo 17 de noviembre contra los recortes que denunciaron que están en marcha en el ámbito educativo.

Así, la asamblea rechaza la reducción de horarios en las bibliotecas, la subida de precios en los bares universitarios, el aumento de las tasas, la eliminación de las bicicletas y el bus circular así como la masificación de las aulas y los comedores. Los convocantes animaron a los compañeros de educación secundaria a que sumen a la protesta del día 17.