Los alumnos de Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO) de Mallorca utilizan las redes sociales para amenazar, difundir rumores o insultar a compañeros de clase. Es el llamado cyberbullyng o cyberacoso. Una práctica que el 2% del alumnado de Mallorca, unos 600 estudiantes, reconoce ser víctima de forma semanal. Estos datos se desprenden del estudio elaborado por el departamento de Pedagogía Aplicada de la UIB para el Consell de Mallorca. El trabajo revela que las redes sociales son la principal vía por la cual se practica el acoso digital.
El profesor Rubén Comas, autor del estudio, explicó que el porcentaje de víctimas del cyberacoso aumenta hasta el 7% en aquellos alumnos que reconocen haberlo sufrido como mínimo una vez al mes. Si tenemos en cuenta que en la isla existen unos 29.000 alumnos de ESO, este porcentaje indica que son 1.700 los alumnos que de forma mensual reciben alguna vejación de compañeros de aula mediante las nuevas tecnologías. La prevalencia de jóvenes que han admitido haber acosado por la red y la de los que reconocen haber sido víctima de un cyberacoso es muy similar.
El trabajo de la UIB ha sido realizado con un universo de 1.224 alumnos de los centros docentes Aula Balear, Es Liceu, Es Lladoner, IES Felanitx, IES Guillem Sagrera, IES Llorenç Garcías, IES Son Pacs y la Porciúncla. Se han estudiado los perfiles de las víctimas, de los acosadores y de los espectadores. Estos últimos manifiestan tener constancia de casos de cyberacoso en un porcentaje más alto que las propias víctimas.
La herramienta más utilizada por los jóvenes para acosar son las redes sociales. Un 0,8% de los alumnos afirma haber sufrido insultos a través de ellas al menos una vez por semana y un 1,4% los ha recibido mediante correos electrónicos. Un 1,9% han sufrido varias veces por semana mentiras, rumores y falsedades en las redes sociales. Un 1% ha recibido amenazas y un 1,2% de los consultados reconoce que han publicado o manipulado videos suyos sin permiso en redes sociales y otros soportes digitales.
Rubén Comas indicó que, pese a que el porcentaje de víctimas de cyberbullyng pueda parecer bajo, hay que tener en cuenta que son 600 jóvenes vejados o ridiculizados en la red. "Es preocupante este dato, ya que los insultos, los falsos rumores o los videos o fotografías vejatorias permanecen en la red y pueden ser vistas por mucha gente y durante mucho tiempo", aseguró el autor del estudio.
La encuesta se ha realizado de forma telemática y con la supervisión de los profesores. Una de las conclusiones destacadas es que el acoso de los hombres es más fuerte que el que practican las mujeres. Mientras los chicos insultan, amenazan o difunden imágenes vejatorias, las chicas únicamente se dedican a difundir rumores falsos de alguna compañera.
Otro dato que revela el trabajo del departamento de Pedagogía Aplicada de la UIB es que los acosos digitales son siempre entre jóvenes del mismo sexo. No han detectado ningún caso de un chico que hubiera utilizado las redes sociales para acosar a una compañera de clase.
Desde la UIB aconsejan a los centros educativos y a los padres que apliquen medidas para detectar de forma preventiva los casos. Abogan por incorporar canales de denuncia y para advertir los posibles casos en chicos más vulnerables. Rubén Comas también apostó por la alfabetización digital de los alumnos para que conozcan los riesgos y las consecuencias de la red.
El Consell hará llegar el estudio a los centros escolares y les animará a instaurar planes para erradicar el cyberbullyng de las aulas mallorquinas.
