A unos 40 millones de euros asciende la deuda que el Govern tiene contraída con las empresas de limpieza, según los datos facilitados ayer por la patronal Abenet y el sindicato UGT, desde el que se denuncia además que algunas compañías tienen pendientes de cobro facturas de hace dos años.

Esta situación es calificada de extremadamente grave por el sector, ya que en la reunión mantenida ayer por las patronales del ramo y los sindicatos con el vicepresidente económico, José Ignacio Aguiló, éste les comunicó que se va a hacer lo posible para abonar las facturas de los próximos meses, pero que los atrasos no se podrán pagar hasta el próximo año, según aseguró el secretario de Acción Sindical de UGT en las islas, Manuel Pelarda.

El portavoz sindical afirmó también que el vicepresidente económico había advertido a los representantes del sector de la necesidad de "adelgazar" los servicios que están prestando para reducir así el gasto, y se recordó que la desaparición de varias empresas públicas puede provocar el que también haya menos edificios que limpiar.

Manuel Pelarda reconoció su especial preocupación por lo que todo lo expuesto va a suponer para el empleo, pero también para los servicios públicos, y recordó los perjuicios que puede conllevar en las dependencias sanitarias un déficit de higiene.

Respecto al primer punto, consideró que los recortes del Govern van a provocar el que más trabajadores pierdan su empleo, tanto en el caso del personal público como entre los asalariados de las empresas externas que son contratadas por el Ejecutivo balear.