El president del Govern balear, José Ramón Bauzá, afirmó ayer, sobre las protestas contra los recortes en materia educativa y sanitaria, que "nadie se cree que estén en la calle" manifestándose por su gestión, ya que acaban "de llegar".

En una entrevista en ´Los desayunos de TVE´, Bauzá negó que en Balears se hayan cerrado plantas o centros de salud y afirmó que incrementar de 18 a 21 las horas lectivas de los profesores "no tiene por qué afectar a la calidad". Realizó un llamamiento a la responsabilidad colectiva para afrontar la situación económica y que todo el mundo debe entender que "las cosas han cambiado. Solo les pedimos que nos ayuden a reducir el gasto que produce la Administración", dijo Bauzá, quien añadió que "no es la intención de ningún presidente aumentar las listas de paro".

El jefe del Ejecutivo apuntó que bajará impuestos "para favorecer la contratación y generar actividad económica".

Sobre las cuentas públicas de Balears, detalló una deuda de 4.500 millones de euros y un déficit de 1.104 millones con proveedores, "a lo que hay que sumar facturas en los cajones" y que en febrero tendrán que devolver 300 millones en bonos patrióticos. Aseguró que a partir de enero no contrataran ningún servicio que no puedan pagar. "Asumo mi responsabilidad, lo que implica asumir la herencia", dijo Bauzá, quien criticó la actitud "hipócrita e irresponsable de los que ahora exigen que se pague".