La próxima semana empieza un curso escolar que en algunas comunidades se prevé agitado por los recortes en las plantillas de profesorado. En Balears más de 150.000 alumnos aterrizarán en las aulas y según aseguró ayer el conseller de Educación, Rafael Bosch, aquí no sólo no se ha recortado en docentes sino que incluso se ha contratado a 35 profesores nuevos.

Hacía falta más personal. La conselleria había calculado que serían necesarios hasta 151 profesores, para asumir las jubilaciones, el incremento de alumnos y los nuevos centros creados, pero la Conselleria ha intentado aprovechar los recursos que ya tenía para contratar a menos gente y ha obligado a volver a dar clase a 116 docentes que estaban realizando otras labores o en programas específicos.

A algunos que hacían de asesores (un total de 79) se les ha devuelto a las aulas; a otros que se iban a ir de año sabático para formarse (21 profesores) se les ha denegado la opción; y a algunos que ejercían en distintos programas de apoyo (como atención a la diversidad o audición y lenguaje) también se les ha puesto a dar clase (16 docentes). El año pasado el anterior equipo de Educación ya prescindió de 57 interinos que, en su mayoría, se dedicaban a estos programas. Bosch garantizó que todos estos programas se mantienen "pero con menos gente".

En total, en el curso que está a punto de empezar habrá 11.366 profesores, de los cuales 8.926 son funcionarios de carrera (158 menos que en 2010) y 2.440 son interinos (193 más que el curso pasado; un número que contrasta con los cálculos de algunos sindicatos).

"Hemos ajustado de donde hemos podido", dijo el conseller, una "optimización", indicó, que empezó el equipo anterior subiendo las ratios. Sobre este aspecto, Bosch indicó que aunque es consciente de que hay situaciones límite en algunos municipios (con 28 ó 29 alumnos por aula) la ratio media está por debajo de los máximos marcados en la normativa estatal. El conseller se mostró convencido de que en el corto plazo las ratios no empeorarán debido al "estancamiento" de la población escolar y a que confían en contar "con el presupuesto suficiente" para acometer nuevas infraestructuras.

Y es que efectivamente el número de alumnos sigue creciendo, pero a un ritmo mucho menor del que experimentó el sistema educativo entre el año 2000 y el 2007, coincidiendo con el boom de la inmigración. Los datos de matrícula actuales (aún pueden variar) hablan de 129.569 estudiantes en los 364 centros sostenidos con fondos públicos de Balears; la cifra supone un aumento de 183 estudiantes en comparación con el curso anterior.

El próximo lunes día 12 empezarán el curso 31.245 alumnos de Infantil, 60.454 de Primaria y algunos de los 24.477 alumnos matriculados en Secundaria (depende del centro; el día de comienzo de curso para los IES es el día 14). En los Programas de Cualificación Profesional Inicial se han matriculado 1.311 personas y 6.613 harán Bachillerato. De estos estudiantes, casi el 68% irá a centros públicos. El 22 de septiembre se incorporarán 6.780 estudiantes de FP (estudios que ofertan este año cuatro ciclos nuevos).

A estos 130.000 alumnos hay que sumar otros 200.000 de centros privados, escuelas de idiomas, centros de adultos y otros. El conseller destacó la apertura de 34 nuevas unidades y de seis nuevos centros. En Mallorca estrenarán colegio en Sóller, en Llucmajor y en Manacor, municipio en el que también abrirá sus puertas "unos de los institutos más grandes de la isla". En total, según la conselleria habrá 970 plazas de nueva creación. Asimismo, se contabilizarán hasta 60 aulas prefabricadas, la misma cifra que en el último inicio escolar.

El primer objetivo que se marcó Bosch cuando aterrizó en la conselleria fue garantizar un inicio de curso "normal". Para ello, durante el verano ha tenido que ir actualizando deudas con centros públicos y concertados y con el transporte. Ayer expresó su máxima confianza en que efectivamente el inicio escolar transcurrirá sin más incidencias de las habituales. Además, mientras en otras comunidades los sindicatos están organizando protestas por los recortes, Bosch espera, a raíz de su diálogo con patronales y agentes sociales y dado que no se ha recortado la plantilla, que las movilizaciones no lleguen al archipiélago balear. Durante el curso que ahora empieza la conselleria aún no podrá garantizar una de las propuestas educativas estrellas del programa electoral del PP, la libre elección de primera lengua de enseñanza, pero el conseller señaló que durante este periodo académico se trabajará para redactar el nuevo decreto de enseñanza de lenguas. Así, se espera que se pueda implantar esta medida en el ejercicio académico 2012/2013.