El conseller de Administraciones Públicas, Simón Gornés, ha anunciado hoy que el Govern balear reclamará al Ministerio de Fomento los 333 millones que tuvo que adelantar por los convenios de carreteras de 1998 y 2004, después de que el Tribunal Supremo haya dado la razón a la comunidad autónoma.

Gornés ha informado en una rueda de prensa de que el Supremo dio la razón a la comunidad en una sentencia del pasado 8 de marzo que hace que los convenios de carreteras de 1998 y 2004 mantengan su vigencia, de forma que se mantienen los compromisos adquiridos por el Gobierno y el Govern en los mismos.

El conseller ha explicado que de este modo, el Govern tiene derecho a reclamar al Gobierno central los 333 millones de euros de distintos proyectos viarios que estaban incluidos en dichos convenios, cuyo pago tuvo que asumir el ejecutivo autonómico, y ha anunciado que dará los pasos para llevarlo a cabo a través de la comisión mixta de seguimiento de dichos acuerdos.

Gornés ha acusado al anterior Govern, presidido por Francesc Antich, de conocer la sentencia del Supremo desde que fue dictada en marzo y de haberla ocultado a la opinión pública "porque daba la razón al PP que había batallado con insistencia en esta cuestión".

La sentencia del Supremo no admite un recurso de casación sobre la sentencia de la Audiencia Nacional de 2008 que revocaba una la orden ministerial de 2005, dictada por la entonces ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, que daba por resueltos los convenios de carreteras de 1998 y 2004.