Miguel Ángel Vázquez (Palma, 1959), director del centro de la UNED en Balears, lleva más de doce años al frente de la delegación de la Universidad Nacional a Distancia, abierta hace 34 años. Habla del inesperado aumento de alumnos de los últimos tiempos y asegura que, a diferencia de lo que dicen algunos, en la UNED también se usa el catalán y se desarrollan contenidos propios de la comunidad.

— ¿Cuántos alumnos tienen y cuántos estudios ofertan?

— Hemos tenido 11.159 alumnos en el último curso. Esto supone un incremento del 11,2%. En el último curso ha habido 26 grados que han coexistido con 27 titulaciones de licenciaturas, ingenierías y diplomaturas, que están en proceso de extinción. Las licenciaturas desaparecerán en 2014-2015 y las diplomaturas el 2013-2014.

— ¿Hay novedades de cara al curso que viene?

— El próximo curso se instaura el nuevo grado de Ciencias Jurídicas para las Administraciones Públicas, que está dirigido a aquellas personas que están en la administración pública o que simplemente les interesa porque su ámbito es el derecho administrativo. Aparte de estos títulos, también preparamos el acceso a la universidad para mayores de 25 años y la Selectividad. Para el curso que viene activaremos también el acceso para mayores de 40 años convalidándoles experiencia profesional. Además, los que preparen el acceso para mayores de 25 años tendrán como novedad exámenes parciales para ir eliminando materia y no jugárselo todo en el examen final.

—¿Cuál es el perfil de alumno que estudia en la UNED?

— En el 80% de los casos tiene obligaciones laborales o familiares y la media de edad es de 37 años.

—¿Qué porcentaje hay de alumnado extranjero?

—Los alumnos extranjeros constituyen uno de nuestros núcleos. Hablamos de un 16% del total. La mayoría de ellos son como el resto del alumnado de la UNED: personas que trabajan, con obligaciones familiares... Predominan los alumnos de Latinoamérica, aunque también tenemos de la Unión Europea. El porcentaje sobre todo se acentúa en títulos como Turismo o Estudios Ingleses, y en el curso de acceso para mayores de 25 años, que supera el 22%. La mayoría de los extranjeros llegan sin tener el acceso a la universidad, empiezan por eso y se quedan.

—¿Qué estudios son los más demandados?

— El grado de Psicología tiene en sus dos primeros cursos 591 personas: tenemos muchos más alumnos que en muchas universidades presenciales. En el primer curso del grado de Derecho tenemos 326 personas. Y todo es supone un esfuerzo a nivel organizativo. Y además, los estudios de grado suponen una evaluación continua, aunque en nuestro caso, por una decisión del rector que me parece muy acertada, es más flexible y voluntaria en muchos casos. Nuestros alumnos, con cargas y trabajo, no podrían seguir el ritmo.

— ¿A qué se debe el imparable aumento de alumnos?

— Hay varios factores. Por un lado, el efecto llamada que ha tenido la implantación del Espacio Europeo de Educación Superior. Los grados, válidos en toda Europa, son una opción atractiva. Otro factor es la flexibilidad en el acceso. Ahora se podrá acceder a cualquier título desde los ciclos formativos de nivel superior, independientemente de la rama profesional. Además, somos flexibles porque permitimos que el alumno se matricule de un número muy reducido de asignaturas y porque la evaluación continúa es flexible. Asimismo, está la ventaja de la movilidad que tienen los estudiantes. El último factor es, obviamente, la crisis económica. Tenemos muchos alumnos que se han quedado en el paro y que ahora tienen más disponibilidad presencial. Hemos tenido clases-tutoría voluntarias de Psicología a la que han asistido más de cien personas, algo impensable antes.

— ¿Cómo afronta la universidad el aumento de alumnos con menos presupuesto y con la adaptación al Plan Bolonia?

—La UNED tiene 220.000 estudiantes, cifras insólitas y voluminosas que han hecho aparcar la implantación de nuevos grados, porque los presupuestos de las universidades están congelados. Y la UNED es la única universidad pública de ámbito estatal que tiene 62 centros en todo el país y tiene la obligación de matricular a cualquier persona que esté en condiciones de acceso. Para limitar las matrículas estamos recortando de manera muy inflexible el período de matrícula.

— ¿Se plantean poner ´numerus clausus´ en algunos estudios?

—Se plantea en algunas facultades, pero según los estatutos tenemos que atender la demanda de estudios a distancia. Hace algunos años había en algunos estudios pero no era el procedimiento.

— Hay personas que asocian a la UNED con clases en castellano y con Madrid, y a la UIB, con clases en catalán y con Balears.

— Eso es un error, aunque dependamos académicamente de Madrid. Los profesores en las tutorías usan las dos lenguas indistintamente y en nuestras actividades desarrollamos temas propios de aquí. En marzo organizamos una ruta literaria en torno a la figura de Ramon Llull a la que asistieron tano alumnos de aquí como del resto del país. Ahora también impartimos un curso en el centro penitenciario sobre el patrimonio artístico e histórico de Balears. Además, ofrecemos cursos de catalán, gallego y euskera.

— ¿La UNED es la hermana pobre de la UIB?

—Exactamente. La UNED es lo que más económico le sale a las instituciones educativas de las islas. Los Consells insulares, el de Mallorca, Menorca y Eivissa, aportan 380.000 euros, 72.400 y 75.000 respectivamente. Si divides estas cantidades por el número de alumnos la inversión sale a 60 euros por alumno. Y no critico estas aportaciones. Es que no hay nada más rentable, es economía a razón de escala. Nosotros para poder funcionar apostamos por la cooperación con otros centros y compartimos recursos, especialmente con las asignaturas con menos alumnos. Hay que hablar de la importante labor social de la UNED, contribuyendo a incrementar el nivel cultural y educativo dando una segunda oportunidad, permitiendo estudiar a gente que no se puede ir a la península... Y no hacemos competencia a la UIB: menos del 8% de nuestros alumnos tienen menos de 25 años. Se nos ve menos porque somos más discretos y tenemos menos recursos.

—¿Cuál es el porcentaje de abandono?

—Es más alto que en la universidad presencial. Según la titulación, hablaríamos de entre un 30 y un 40% de alumnos que no se presentan al examen. La tasa de éxito es similar a las presenciales.