Hay un grupo de interinos, los que no son cabeza de lista, que están acostumbrados a vivir con cierto grado de incertidumbre (algunos más, otros menos) sobre en qué condiciones se desarrollará su labor cuando les llamen para incorporarse. Pero de la incertidumbre a la alarma se pasa rápidamente cuando la duda es "¿me llamarán algún día?".

Ésta es la inquietud que se extiende estos días entre algunos interinos docentes ante las medidas de austeridad adoptadas por la conselleria de Educación, Cultura y Universidades; unas medidas que, entre otras cosas, implican la vuelta a la docencia de profesores que estaban dedicándose a otras tareas, como la asesoría en la Conselleria o la formación. Y un profesor que vuelve, es un interino que ya no hace falta; algo que se suma a los recortes de personal que ya vivieron los centros el año pasado.

Afiliados de Comisiones Obreras ya han mostrado su inquietud al sindicato ante esta situación, si bien la conselleria de Educación asegura que el número de plazas no sólo no disminuirá el curso que viene, sino que aumentará. CCOO muestra su total incredulidad ante esa aseveración y asegura que los equipos directivos de los centros temen el próximo inicio de curso tras la experiencia que vivieron el año pasado, cuando tuvieron que apañarse con, de media, un profesor menos. En varios institutos se ha intentado arreglar esa carencia aumentando ratios (eliminando un grupo del curso y distribuyendo a los alumnos entre los otros grupos) o quitando a los docentes horas dedicadas a otras actividades (como la biblioteca).

El sindicato mencionado, mirando la convocatoria de vacantes, ha calculado que los interinos tienen, de media, entre 60 y 120 plazas menos para elegir respecto al año anterior. Ponen un ejemplo: un afiliado que el año pasado tenía 245 posibilidades de elección, este año se encuentra con una oferta alrededor de 105 vacantes. Otro ejemplo: un interino de especialidad de lengua y literatura castellana que el año pasado podía elegir entre 80 plazas, este año ve limitada la oferta a 53. Y elegir es sólo elegir: de ahí a lograr una plaza pueden pasar muchos meses para algunos ya que hay más de 7.000 aspirantes admitidos (unos 5.000 excluidos) mientras la oferta es de 2.197 plazas, según datos de la Conselleria.

Desde dicho departamento aseguran que no sólo no disminuirán las vacantes, sino que estas aumentarán de cara al curso que viene. Si en el curso pasado se ofertaron 2.136 plazas, para el curso que viene la previsión es de 61 plazas más. Fuentes de la Conselleria dirigida por Rafel Bosch achacan este incremento a la apertura de centros educativos nuevos, lo que hace necesario más personal.

Entre los profesores que van a volver al aula hay 30 asesores técnicos docentes (ATD) y 50 maestros que estuvieron la pasada legislatura realizando labores de asesoría y administración en la Conselleria. Tras suprimir esos 80 puestos, la plantilla de docentes alejados de los alumnos se ha quedado en 155 personas. Y desde el departamento responsable de Educación ya se ha asegurado que, ante la "dramática" situación presupuestaria, mandarán a más de estos profesores-asesores-gestores de vuelta a su plaza fija.

Desde CCOO señalan que en este caso están a favor de que estos docentes vuelvan a sus plazas y recuerdan que ellos denunciaron el año pasado el hecho de que se ´libere´ a profesores para cubrir plazas de administrativos.

Fin de las ´licencias de estudio´

Otra de las medidas de austeridad adoptada por la Conselleria y criticada por los sindicatos CCOO y STEI-i hace referencia a la supresión de las ´licencias de estudio´, que ya habían sido concedidas de forma provisional.

Educación ha dado marcha atrás respecto a la ´liberación´ de 24 profesores para que puedan –durante un periodo máximo de un año y sin perder la nómina– completar su formación o realizar un proyecto de investigación. La razón: un ahorro de 800.000 euros para las arcas públicas. El pasado mes (el 14 de junio, un día antes de la toma de posesión de José Ramón Bauzá como president) el anterior equipo aprobó la lista provisional de admitidos de estas liberación, con 24 profesores que seguirían percibiendo su nómina; y otros cinco que no recibirían nada, como si hubiesen pedido una excedencia. En estos últimos cinco casos se les ha permitido seguir adelante.

CCOO critica duramente esta medida y explica que varios de estos profesores ya había pagado la matrícula del centro donde iban a formarse. Recuerdan además que el derecho a formarse está en el Estatuto de los Trabajadores y no descartan presentar un recurso. El STEI-i valora que estas licencias "son muy valiosas para la mejora del sistema educativo" y propone que se mantenga la convocatoria de este año y se "inicie el diálogo para estudiar la oferta posterior".

Recortes para ahorrar

La Conselleria ha denegado a 24 profesores la opción de ´liberarse´ un año de forma remunerada para dedicarse a formación. El ahorro es de 800.000 euros. La lista provisional de admitidos fue aprobada por el anterior equipo un día antes de la toma de posesión de Bauzá.