Los ciudadanos de Balears están significativamente más satisfechos con los servicios de expedición del DNI que los residentes en Aragón. Sin embargo, pocas comunidades están tan descontentas con la calidad de agua como el archipiélago, donde más del 50% de la población se declara muy insatisfecha. Asimismo, el 47% de los isleños está muy decepcionado con el transporte público. La falta de equipamientos culturales y las carencias de escoletes públicas son los otros ámbitos que generan más críticas entre los ciudadanos del archipiélago.

Estas son algunas pinceladas de la macro-encuesta del ministerio de Política Territorial y Administración Pública realizada en 2010 para comparar el grado de satisfacción entre los ciudadanos de diferentes comunidades autonómas con los servicios públicos. Este informe recientemente presentado por la Agencia de Evaluación de las Políticas Públicas y la Calidad de los Servicios recoge opiniones sobre diversos ámbitos: desde el sistema educativo y sanitario hasta el carril-bici o los puntos públicos de internet.

Un problema principal

Balears es la comunidad en a que más gente percibe el transporte como uno de los tres principales problemas de la región (sólo es un 8%, pero los investigadores consideran que es una cifra significativa ya que se les pidió a los encuestados que nombrasen sólo tres problemas). Según el informe, en el archipiélago "los ciudadanos están detectando problemas con el funcionamiento de los transportes públicos". Además, Illes Balears despunta en el gráfico sobre la insatisfacción con las infraestructuras de transporte al lograr el récord de descontento, con un 48%. Le sigue Canarias, algo que el estudio achaca a que los habitantes del archipiélago "demandan mayores infraestructuras, quizás para suplir los costes asociados a la insularidad". Balears y Canarias son además quienes peor valoran las obras públicas. El archipiélago balear es la comunidad que peor valora la seguridad vial de sus carreteras, con el suspenso del 60%.

Los que peor parados salen dentro del ámbito del transporte son los autobuses interurbanos, que no consiguen el aprobado de cuatro de cada diez residentes. Desde el Ministerio se subraya el caso de la comunidad balear, donde hay una satisfacción muy elevada (del 90%) con el funcionamiento de los aeropuertos, pero no tanto con el transporte aéreo.

Los autores indican que esta diferencia de percepción quizás incluya otros factores como, por ejemplo, el precio de los vuelos. No hay que olvidar que según un estudio del Govern, los vuelos son un 37% más caros en el archipiélago balear que en la península. En cuanto al transporte marítimo, una cuarta parte de la población balear indicó no estar muy contenta con el servicio. Los taxis y el metro son aplaudidos por más del 70% de la población, porcentaje que baja al 60% en el caso de los buses urbanos.

Los resultados de la encuesta sobre la educación llaman la atención. Y es que aunque la comunidad balear ostenta las peores cifras de fracaso escolar de toda Europa, sólo un 8% de la población lo considera uno de los principales problemas. De hecho, seis de cada diez ciudadanos están contentos con la educación "en su conjunto", así como con los colegios, la Formación Profesional y la Universitat. La enseñanza en los institutos ya no gusta tanto y sólo agrada a la mitad de la población. Además, el 70% cree que el número de escoletes es insuficiente. Los autores del estudio concluyen que a más número de habitantes del municipio, más posibilidades de que los ciudadanos estén más preocupados por el funcionamiento de la enseñanza.

La sanidad no es un problema. O por lo menos así lo considera un 96% de los baleares. Lo más criticado es la atención de los médicos especialistas y los servicios de urgencias de los hospitales, pero en general el 70% de los residentes no tienen quejas sobre el sistema sanitario. Solo los asturianos, vascos y navarros superan a los baleares en satisfacción. Los autores del documento han detectado que las personas de entre 25 y 65 años y las mujeres normalmente están menos satisfechos con la sanidad pública que el resto. El elevado número de ciudadanos inmigrantes en Balears puede contribuir a aumentar el porcentaje de satisfacción con el sistema público de salud, pues los extranjeros tienden a evaluarlo positivamente.

El miedo a ser robado en casa

La seguridad ciudana tampoco es uno de los problemas principales del archipiélago para el 95% de los residentes. Eso sí, entre un 30 y un 40% está preocupado por esta cuestión en general. Otros aspectos que generan más inquietud son el gamberrismo y el vandalismo por un lado, y los robos y atracos en viviendas, que atemorizan a seis de cada diez ciudadanos. El miedo al asalto en el hogar es más acusado en Balears que en el resto de comunidades. Los homicidios y la seguridad en los colegios, parques y jardines son los supuestos que menos preocupan a los isleños.

El estudio también analiza las opiniones de los ciudadanos respecto a varios servicios administrativos específicos. Llama la atención que un 35% indique que ha recibido información incompleta o defectuosa de parte de un empleado público, que un 11% diga haber sido discriminado y que un 20% asegura haber recibido un trato descortés. Las personas inmigrantes y de clase social baja, reza el informe, son los que más denuncian esta discriminación. El Registro Civil contenta a más del 80%; el servicio de expedición del DNI y pasaporte tiene satisfecho al 75% de la población.