Es una de las promesas estrella de José Ramón Bauzá, garantizar que los padres podrán elegir el centro educativo para sus hijos y la lengua vehicular de la enseñanza. Miembros de peso en el PP balear afirman en privado que esta propuesta es simplemente inviable porque implica una gran inversión económica, y no están los tiempos para eso.

En los colegios de una línea –habituales sobre todo en los pueblos– no puede aplicarse la libre elección de lengua, asegura un sector del PP, porque si la mayoría de los progenitores optasen por el castellano, no habría lugar para los alumnos que quisieran estudiar en catalán, o a la inversa. Y con la actual coyuntura de crisis, el Govern no podría ampliar las líneas para dar cabida en cada caso. Del mismo modo, si el Govern optara por ofrecer al alumnado en minoría lingüística irse a otro centro, se incumpliría la libre elección de escuela, la otra promesa estelar de Bauzá.