Y con ella llegó el escándalo electoral. No por cuestiones como propuestas o declaraciones polémicas. No. El escándalo ha llegado por un cartel de los pechos de una candidata cubiertos por dos manos masculinas como reclamo electoral y la frase "dos grandes argumentos" como explicación. Se trata de Soledad Sánchez Mohamed, quien ha anunciado su candidatura a la alcaldía de Ciutadella por el Partido Democrático de Ciutadella, una formación de nuevo cuño cuya única cara visible, por ahora, es la de la propia candidata.

El cartel puso los pelos de punta a Esquerra de Menorca-EU, que lo denunció al Institut Balear de la Dona al considerar que la imagen era sexista y atentaba contra la dignidad de la mujer. El Institut informó a la Junta Electoral y al Observatorio de la Publicidad del Instituto de la Mujer y ayer fue retirado del escaparate de la sede del partido. La consecuencia fue que, también ayer, se convirtió en noticia en las webs de la mayoría de los periódicos del país y el cartel ha corrido como la pólvora por internet.

"Son mis tetas, las manos son las de mi pareja, el cartel es estético y los que critican son unos puritanos", declaró ayer Sánchez quien consideró "alucinante que sea precisamente EU" quien lo ha denunciado. "Se ha comportado como un partido talibán", agregó la aspirante a la alcaldía. Precisó que "nadie" ha obligado a su partido a retirar el llamativo cartel y sustituirlo por otro con una imagen de Es Pla de Ciutadella, sino que se trataba de algo "planificado" puesto que "era la idea que teníamos cuando hubiéramos conseguido llamar la atención, como ha ocurrido".

Según Soledad Sánchez, la polémica imagen no estaba pensada como cartel preelectoral, sino como presentación de una de sus propuestas para el Puerto de Ciutadella, consistente en crear, además de varias infraestructuras, una zona de bares abiertos las 24 horas. "Para dar a conocer este proyecto preparamos un formato para repartir durante el día con imagenes normales y otro para la noche, que era la fotografía de mis pechos", explica. Agrega que la imagen empezó a circular por internet y cuando llegó a las sedes de los otros partidos "empezaron a lanzar pullas", ante las cuales ella respondió convirtiéndola en cartel y colocándola en la sede del partido.

Los comentarios de los vecinos no se hicieron esperar. Para Soledad Sánchez, "este escándalo se ha montado como cortina de humo con el fin de tapar los problemas reales de Menorca, que desde luego no son mis tetas, y teniendo en cuenta la resonancia que ha tenido ha sido un obsequio a la tontería humana".

En la web de su partido, el único rostro y el único nombre que aparece es el suyo. Los escritos también son sólo suyos. El que ha dedicado al escándalo provocado por su cartel lo ilustra con una imagen del cuadro ´La libertad guiando al pueblo´, de Delacroix. "Los que deberían ser los más firmes defensores de la libertad resultan ser los más retrógrados aquí en Menorca. Y lo que nadie se ha atrevido decir, lo han dicho ellos. Critican mi desnudez como un insulto, cuando es una exaltación de la libertad", resalta en el texto. En las declaraciones que efectuó ayer a este periódico afirmó que en su tiempo la obra de Delacroix también fue "terriblemente censurada, al igual que ahora mi cartel, aunque en aquel caso fuera arte".

Agrega que el pintor representó "el levantamiento social contra un sistema opresor", algo similar a lo que ella pretende hacer en política, aunque se desconoce quiénes más se encuentran en su partido. Asegura que eso se debe a que quieren resaltar "los proyectos, no las personas" y que hasta el miércoles su partido no existió oficialmente porque había "algunas deficiencias que subsanar", por lo que la lista electoral la presentará "en los próximos días".

Puritanos o no, lo cierto es que los desnudos de los políticos siempre provocan polvaredas. Albert Rivera, de Ciutadans, con su cartel electoral de 2006, o un año después la entonces teniente de alcalde de Lepe, María Dolores Jiménez (PP), lograron que numerosos ojos se posaran en ellos por aparecer desnudos. Incluso los populares de Inca hicieron amagos de desnudo ilustrando con partes de sus cuerpos un calendario para este año, aunque no con el claro ánimo provocador que refleja el cartel de Soledad Sánchez.