El reputado filósofo, sociólogo y politólogo frances Sami Naïr diseccionó ayer en el Parlament la actual situación del mundo árabe, del que dijo que por primera vez desde el siglo XIX está entrando en la modernidad occidental.

Sobre el personaje que está marcando la revolución en Libia, el dictador Muammar el Gadafi, dijo que se trata de "un loco. Es un personaje enfermo, megalómano y narcisista, que no vacilará en matar a la mitad de la población de Libia con tal de aferrarse al poder y que ha destrozado el Estado libio, no existe Estado en ese país".

Según las últimas informaciones de las que disponía este analista que ayer tarde pronunció una conferencia en el Parlament, "Gadafi ha perdido la batalla. La Cirenaica está fuera de su dominio y Tripolí está en llamas. ¿Qué puede ocurrir ahora? Que pierda el poder porque le maten o le aparten de él, o que se exilie en el África subsahariana. Tiene dinero para ello. Pero esta última opción no sería aconsejable porque, como he dicho, se trata de un loco que atacará Libia con mercenarios o terroristas desde el sur", pronosticó Naïr.

De los cambios políticos vividos en el mundo árabe, el politólogo consideró el más importante el de Egipto ya que, dijo, "por su peso cultural y científico, cuando Egipto va bien, el mundo árabe también".

Sobre la posibilidad de que estas revoluciones triunfen en Argelia y Marruecos, Naïr dijo que en el primero de estos países los militares pueden propiciar un cambio de régimen para seguir controlando el petróleo junto a las élites políticas mientras que en el caso del reino alauí, vio difícil el cambio porque la oposición política apoya a la monarquía. Sobre la actuación de EEUU y Europa en estos conflictos, lamentó la tibieza de Norteamerica que, dijo, se traducirá en una inacción total cuando las revueltas lleguen a Arabia Saudí. "El papel de Europa ha sido vergonzoso. Han apoyado a los tiranos por intereses económicos", sentenció.