Los empresarios de la construcción opinan de manera mayoritaria que la situación actual, tanto de su empresa como del sector en el que desarrollan su actividad, es peor que hace cuatro meses, según el último estudio demoscópico de Gadeso, que analiza los efectos de la estacionalidad en las pequeñas y medianas empresas de Mallorca durante el último cuatrimestre.

En el panorama actual de crisis económica, el pesimismo determina las opiniones de las fuentes consultadas. Un 95 por ciento de los empresarios de la construcción cree que la situación es peor ahora que hace cuatro meses. Un 94 por ciento opina que su empresa también ha empeorado. Y un 81 por ciento tiene igualmente la percepción de que la economía de la isla sigue en recesión. Del mismo modo, las expectativas en el futuro más próximo no ofrecen resultados esperanzadores. El 87 por ciento opina que la situación de su empresa será peor, el 88 por ciento cree que el sector empresarial de la construcción seguirá en crisis y un 70 por ciento considera que la situación de la economía mallorquina no habrá salido de la recesión.

Un panorama calcado se produce en las empresas de servicios auxiliares de la construcción, fontanería, carpintería y electricidad, si bien en este sector la opinión sobre la situación actual y las perspectivas de futuro marcan tendencias todavía más negativas.

La alta negatividad también acompaña las opiniones recogidas en en el sector industrial, un sector muy ligado a las variaciones de la demanda turística, de la actividad de la construcción y del consumo interno.

La mayoría de los empresarios, hasta un 90 por ciento, opina que su situación es peor en la actualidad que en los últimos cuatro meses. El 88 por ciento cree que la situación del sector también es peor y un 78 por ciento considera que la economía de la isla todavía está en una situación más negativa que hace cuatro meses. Asimismo, la confianza en el futuro de estos mismos empresarios también es muy baja.

En el sector de la restauración el panorama es otro, sin duda por la influencia de la reciente temporada turística. No obstante, se trata de un tipo de empresas afectadas por dos problemas fundamentales: el descenso del consumo debido a la crisis y una excesiva y repetitiva oferta, apunta el informe de Gadeso. La mayoría de los consultados, un 49 por ciento, opina que la situación de su propia empresa está igual que en los últimos cuatro meses, frente al 43 por ciento que cree que ha empeorado. El empate entre estas dos opiniones es total si se pregunta a los empresarios por la situación del sector, donde sólo un 8 por ciento cree que ha mejorado. Y con respecto a la economía de Mallorca, un 12 por ciento considera que mejora, un 32 por ciento cree que sigue igual y un 56 por ciento considera que sigue en clara recesión. Sin embargo, las expectativas de futuro de los empresarios son más pesimistas que las que reflejaron en una anterior investigación, debido, según Gadeso, al final de la temporada turística, la mejor época para la mayoría de estas empresas.

Por su parte, en el sector del comercio la percepciones de los empresarios también son menos negativas y mejoran ligeramente en comparación con la anterior encuesta. No obstante, la situación, según Gadeso, no se puede calificar de positiva, pues muchos comerciantes señalan que no han conseguido niveles de venta significativos. Ni la llegada de más turistas ni el periodo estival de rebajas han conseguido inyectar optimismo en la planta comercial de la isla. Un 52 por ciento cree que la situación del sector todavía es peor que en el último cuatrimestre, el 40 por ciento cree que no ha variado y el 8 por ciento considera que ha mejorado.