Era un torneo de golf, pero el PP prefirió que lo promocionaran los tenistas. Caras tan conocidas internacionalmente como Anna Kournikova, Boris Becker, Carl Uwe Steeb o Rafel Nadal han puesto su cara en los últimos años para publicitar el Mallorca Classic, el torneo de golf en s´Era de Pula (Son Servera) siempre criticado por la izquierda, y hoy más que nunca bajo sospecha judicial.

Pero no son solo las estrellas del deporte las que han prestado su cotizadísima imagen para incentivar la llegada de turistas a Mallorca aprovechando la competición golfista. La modelo alemana Claudia Schiffer arrasó literalmente en la presentación que hizo del torneo en marzo de 2005 en la renombrada feria internacional turística de Berlín. Ante más de un centenar de periodistas internacionales, presentó la edición de ese año del Mallorca Classic dejando un gran sabor de boca a los políticos locales –Jaume Matas y Joan Flaquer– y la organización.

Dos años más tarde, en 2007, la modelo volvió a acaparar los flashes por el mismo motivo, aunque acompañada en este caso de Boris Becker.

Pero si se recuerda una presentación del Mallorca Classic por su revuelo, ésta fue la de 2006, con la asistencia de la rusa Kournikova. La tenista se ganó a la audiencia gracias a su espontaneidad, y a su lado, un Jaume Matas que no cabía de gozo. Poco importó que la tenista reconociera ante la prensa que apenas practica el golf, puesto que derrochó sonrisas a su paso.

Y a todo esto ¿quién pagó los cachés de estas celebridades? El PSOE balear acusó al PP en el Parlamento, a finales de 2006, de utilizar el millonario patrocinio al Mallorca Classic como "una caja B" para abonar a su vez los correspondientes contratos a las estrellas.

En su momento, Romeo Sala, entonces la cara visible del evento en el Pula Golf, se apresuró a asegurar que la visita de Schiffer fue sufragada mediante un intercambio de publicidad con empresas a las que ella presta su imagen y que cedieron su presencia a cambio de anunciarse gratuitamente en el torneo mallorquín. Del resto, nunca se ha sabido.