La red viaria de la Sierra de la Tramuntana recibirá una inyección de diez millones de euros para la reparación de los daños causados por los últimos temporales y desprendimientos de tierra y la realización de un estudio sobre los puntos más deteriorados de la carretera que une Pollença y Andratx.

Estos diez millones forman parte de las inversiones estatutarias acordadas por el ejecutivo autonómico con el Gobierno central y se suman al convenio de más de 400 millones de euros para carreteras que el pasado año se firmó con el Consell de Mallorca, según ha explicado hoy el presidente balear, Francesc Antich.

Antich ha comparecido hoy ante los medios de comunicación junto con la presidenta del Consell de Mallorca, Francina Armengol, y ambos han firmado el convenio por el cual la institución insular dispondrá de este montante que, en primer lugar, se dedicará al pago de la reparación de la carretera Andratx-Estellencs.

Armengol ha explicado que los operarios trabajan "día y noche" en esta carretera, afectada por un desprendimiento de tierras, y ha apuntado que se espera que en mayo pueda ser reabierta al tráfico en perfectas condiciones.

También se financiarán actuaciones como ésta en la carretera de Sóller a Pollença, en el término municipal de Escorca, y se elaborará un estudio integral de toda la vía, desde Andratx hasta Pollença, para localizar los puntos donde es más necesario invertir y hacer obras.

El Consell prevé firmar además un convenio con el Instituto Geológico y Minero de España para controlar y prevenir deslizamientos y otros efectos adversos de los movimientos que registran las montañas en las carreteras de la Sierra.

El presidente del Govern ha valorado esta colaboración de tres instituciones (ejecutivo balear, central e insular) y ha recordado que se trata de inversiones históricas que servirán para saldar el déficit de infraestructuras que las islas han padecido durante años.

Fruto de esta colaboración entre administraciones, Antich ha mencionado los 400 millones que Baleares recibirá del Estado cada año durante los próximos siete años en virtud del compromiso que se recoge en el Estatuto de Autonomía, 2.800 millones en total.

Antich ha subrayado que el Govern ya ha iniciado la negociación con el ejecutivo central de las inversiones estatutarias para 2010 entre las que figuran como objetivos el tren, el puerto de Ciutadella, la reforma de la Playa de Palma y las nuevas tecnologías.

"La colaboración entre administraciones es fundamental sobre todo en tiempos de dificultades económicas (...), no obstante, Baleares es una de las comunidades autónomas que mejor está afrontando esta crisis. Para seguir así, hemos de cumplir nuestros deberes", ha concluido el presidente.