Aunque el PP anunció que la petición de suspensión de militancia por parte de su ex president, Jaume Matas, había sido tramitada por la mañana, el partido admitió que no les había sido entregada todavía por escrito esta solicitud, aceptada de inmediato por los populares. Fue el abogado de Matas, Rafael Perera, el que se encargó de comunicar por teléfono al vicesecretario general del partido, Miquel Ramis, de la decisión de su defendido. Ramis, según explicó, informó de inmediato al presidente del PP balear, José Ramón Bauzá, quien a su vez se lo hizo saber a la dirección nacional del partido. El vicesecretario general aseguró que, aunque no había visto el escrito con la petición de Matas, consideraba suficiente con que Perera le asegurara la existencia de este escrito. Agregó que desconocía si el también ex ministro había recibido alguna indicación en este sentido por parte de la dirección nacional del PP.