El abogado mallorquín Rafael Perera aseguró ayer que el ex presidente de Balears, Jaume Matas, "actuó en todo momento con corrección y sin haber incidido en ninguno de los delitos que se le imputan" en relación al caso Palma Arena. Tras cinco meses de espera, el ex mandatario autonómico y del PP balear podrá el martes dar su versión de los hechos sobre este asunto donde la Justicia investiga el aumento del coste en la construcción del velódromo Palma Arena en la pasada legislatura, el incremento de su patrimonio y la financiación del PP.

Perera y el también abogado defensor Manuel Ollé pasaron el fin de semana en Madrid con Matas preparando la declaración con el "deseo" y "propósito" del ex presidente de "colaborar" con la Justicia y "aclarar los hechos".

Minutos antes de trasladarse ayer tarde a Palma, Perera recordó que su defendido ha solicitado comparecer ante el juez desde hace un año, al tiempo que comentó que es "infrecuente" que la citación del juzgado se formalizara hace cinco meses. "Mantengo que el señor Matas, según su versión, ha actuado con arreglo a la legalidad", insistió el letrado, que precisó que ni su defendido ni el juez tienen en cuenta las informaciones publicadas en los medios sobre este caso.

En opinión de Perera, el proceso judicial no es un "proceso mediático", entre otras razones porque se han publicado informaciones "incorrectas, no ajustadas a la verdad" o incluso "deformadas".

El juez Castro le imputa a Matas delitos de prevaricación, cohecho, malversación, apropiación indebida, falsedad documental, tráfico de influencias, blanqueo de capitales, delito fiscal y electoral.

El estado de ánimo del ex mandatario balear es "totalmente normal" y está "deseando comparecer", ha subrayado Perera, quien afronta a sus 81 años su papel de "codefensor" en "plenitud de forma", con "profesionalidad" y con la intención de colaborar con la Justicia.