Un periodista que declaró hoy en calidad de imputado ante el juez que instruye el caso Maquillaje, Juan Ignacio Lope Sola, afirmó que el propietario de la productora Studio Media, Alfredo Conde, le pidió a mediados del año 2000 un listado con las personas y partidos políticos que formaban parte del Consell, así como asesoramiento periodístico y técnico, todo ello meses antes de que la Institución insular adjudicase la puesta en marcha y explotación de Ona Mallorca a esta empresa audiovisual.

Durante su comparecencia ante el magistrado del Juzgado de Instrucción número 2, el fiscal Juan Carrau y varios de los letrados personados en el procedimiento, el encausado, Carlos Marín, negó sin embargo que Conde, en libertad bajo fianza de 200.000 euros por este caso y presunto testaferro del ex conseller insular de Territorio, Bartomeu Vicens, nunca le comentó cómo sabía que Studio Media iba a resultar adjudicataria en diciembre de ese mismo año del impulso de la emisora pública.

Tal y como recordó, Conde se dirigió a él para pedirle asesoramiento para la creación de la cadena ya que era profesional técnico, aunque insistió en que no sabía por qué le pidió información sobre las áreas de gestión del Consell. El imputado, asistido por el abogado Juan José Cano de Alarcón, admitió sin embargo que remitió el listado al propietario de Studio Media, después de que el juez le exhibiese el correo electrónico que Marín envió a Conde con la información solicitada.

En este punto de la declaración, el encausado aseguró desconocer la relación de Conde con la entonces presidenta del Consell de Mallorca, Maria Antònia Munar, quien precisamente está citada a declarar el próximo miércoles, por tercera vez dentro de esta causa, para dar explicaciones sobre su presunta implicación en esta supuesta trama de corrupción.

Marín aseguró además que nunca tuvo una relación contractual con la productora sino que facturaba por los servicios que prestó, aunque "en ningún momento me dijeron de dónde provenía el dinero". De hecho, subrayó, no estaba dado de alta como trabajador en la empresa y acudía de forma puntual a los locales de la compañía, que entre los años 2000 y 2006 recibió más de tres millones de euros para la apertura y explotación de Ona Mallorca, y es una de las principales productoras investigadas en el marco de este procedimiento.

Respecto al asesoramiento que ofreció a Conde, el periodista explicó que informó a Conde sobre cómo estructurar una programación, la realización de boletines informativos, qué tipo de periodistas contratar y el funcionamiento general de una parrilla. Finalmente, señaló que las reuniones que mantuvo con el ex director de Ona Mallorca las tuvieron siempre los dos solos, y que los periodistas que le sugirió fueron contratados posteriormente.