Los interrogatorios practicados ayer dentro del sumario del caso Maquillaje permitieron detectar otro documento llamativo en el expediente que el empresario imputado Alfredo Conde presentó al Consell de Mallorca en el año 2000 para conseguir el contrato sobre Ona Mallorca, la radio pública insular. Conde habría certificado su propia solvencia económica mediante un documento bancario relativo a una de sus cuentas corrientes, que nunca había tenido números rojos.