Médicos, médicas, enfermeros, enfermeras, celadores, investigadores y una representación de los profesionales que día a día durante los últimos 55 años hacen o han hecho posible que Son Dureta sea un "símbolo" de nuestra comunidad colgaron ayer sus batas para vestirse de gala. Cambiaron los pasillos del hospital, la sala de operaciones, las habitaciones de los pacientes y los boxes de Urgencias por las butacas y el escenario del Teatro Principal. ¿El motivo? Estaban de fiesta. Celebraron el Acto de la Sanidad de Balears. Con la intención de convertirse en la fiesta del sector sanitario, la primera edición se dedicó a Son Dureta, un centro de referencia que se despide de los ciudadanos. El próximo otoño se estrenará Son Espases. Fue un cálido y emotivo homenaje.

La periodista Neus Albis fue la encargada de presentar el acto con un breve resumen de la historia del centro. Inaugurado en 1955 ha pasado de 300 camas y 150 empleados a contar en la actualidad con 900 y 4.500 profesionales. Fue uno de los primeros hospitales de España en adoptar los programas MIR para formar médicos especialistas y durante muchos años el único de Balears que le llevó a soportar una elevada presión asistencial. Las notas musicales de Andreu y Manolo interrumpieron el relato de la presentadora, quien les pidió un poco de paciencia. En breve llegaría su momento. Tras unas cuantas pinceladas más a la historia, la música sonó de nuevo. Esta vez, les permitió terminar su pieza. Acto seguido, un vídeo con imágenes de los últimos 55 años de Son Dureta emocionó a más de uno. El colofón llegó con la entrega de distinciones a unos setenta profesionales y entidades que, en palabras del conseller Vicenç Thomàs, han convertido el hospital en una "garantía de seguridad en términos de salud y un referente de profesionalidad". Los primeros en subir al escenario a recoger su premio fueron los jubilados que han dejado su huella en el centro. El equipo de fútbol, la coral, las maestras del Aula Hospitalaria, el equipo de seguridad, entidades colaboradoras y la quiosquera Toñi Salvà fueron otros de los galardonados. La gran ovación del público llegó al oír los nombres de profesionales reconocidos, relevantes y apreciados en el entorno sanitario.

En unos meses Son Dureta formará parte de la historia. El acto de ayer significó el pistoletazo de salida hacia la recta final, el traslado a Son Espases. El director general

Joan Serra explicó que un mayor compromiso con los ciudadanos y con el sistema sanitario, los mejores profesionales y medios necesarios y un modelo de organización asistencial centrado en la gestión clínica serán los futuros pasos. Anunció que el centro ya contará con la historia clínica electrónica antes del traslado. Son Espases permitirá, según Thomàs, emprender dos proyecto relevantes: la facultad de medicina y el Instituto de Investigación Sanitaria. En marzo, los profesionales empezarán a familiarizarse con su nuevo lugar de trabajo a través de unas visitas organizadas. Ayer tuvieron un avance con un vídeo que mostró las principales características de Son Espases. Los cánticos de la coral pusieron punto final a la ceremonia dedicada a los 55 años de Son Dureta, un hospital formado por personas que atienden a personas.