El documentalista Pedro Barbadillo, residente en Mallorca, y el cámara Pedro Guillén han sido retenidos hoy junto a la activista saharaui Aminatu Haidar en el aeropuerto de El Aaiún, en el Sahara Occidental, para ser interrogados por la policía, según han denunciado fuentes saharauis.

Los tres llegaron en un vuelo procedente de Las Palmas de Gran Canaria y fueron trasladados por la policía a una oficina del aeropuerto para ser interrogados sobre las 12.40 hora local (11.40 GMT), explicó a Efe la vicepresidenta de la Asociación Saharaui de Violaciones Graves de los Derechos Humanos (ASVDH), Djimi Elgalia.

El propio Barbadillo informó a la Asociación de Amistad con el Pueblo Saharaui de Sevilla de que los agentes de la policía les impidieron en un primer momento grabar, y luego los trasladaron fuera de las dependencias del aeropuerto.

Fuentes saharauis, que afirman haber perdido el contacto con los tres, señalaron que han sido llevados a una comisaría en la capital saharaui.

Por su lado, la agencia oficial MAP informó, citando a la policía del aeropuerto, de que Haidar "rechazó cumplir con las formalidades de la policía a su llegada al aeropuerto de El Aaiún, principalmente la ficha de embarque, que incluye, como exige la reglamentación internacional, información sobre la identidad, la residencia y la nacionalidad del viajero".

En la nota no se hace referencia a la situación de los dos periodistas españoles.

En un duro discurso pronunciado hace una semana con motivo del 34 aniversario de la Marcha Verde (en la que Marruecos se anexionó el Sahara Occidental), el rey Mohamed VI instó a su país a afrontar la "escalada bélica" de los "adversarios de la integridad territorial".

El monarca dijo a los "enemigos" de la integridad territorial que "saben mejor que ninguno que el Sahara es una causa crucial para el pueblo marroquí" y destacó que "no hay lugar para la ambigüedad: o el ciudadano es marroquí, o no lo es. O se es patriota o se es traidor. No hay término medio entre el patriotismo y la traición".

Haidar regresaba a El Aaiún después de recibir en Nueva York el "Premio Coraje Civil 2009" de la Fundación Train, que se une a otras distinciones como el Premio de Derechos Humanos Robert Kennedy que recibió el año pasado en una ceremonia en el Senado estadounidense