El beneficio neto del Sol Meliá en los primeros nueve meses del año fue de 47,5 millones de euros, un 40,7 por ciento menos que en el mismo periodo del 2008, según informó ayer la compañía mallorquina a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Los ingresos hasta septiembre se situaron en 899,9 millones de euros, un 9,3 por ciento menos que en los primeros nueve meses del año anterior.

La compañía considera que estos resultados se presentan en un entorno "ligeramente favorable" a nivel global, en comparación con los ofrecidos hace tres meses, y son calificados de "positivos" ante la contracción del consumo sobre el negocio turístico.

La sociedad hotelera destaca en su comunicación que se han atenuado los gastos, que han disminuido un 16,2 por ciento, así como la tasa media de ocupación, que ha caído un 6,6 por ciento, frente al 12,1 por ciento que marcaba en los primeros seis meses.

Sol Meliá considera que se está cumpliendo el plan de contingencia trazado por la empresa tras la crisis económica que afecta al turismo y que ha permitido ganar efectividad en estos nueve meses al lanzar ofertas unificadas por marca que ofrecen al cliente paquetes de mayor valor añadido.

Un efecto directo de estas actuaciones ha sido la mejor evolución del ingreso por habitación disponible mostrada por las instalaciones que tiene la compañía en ciudades como Madrid, Berlín, Milán y París, así como una recuperación en determinadas zonas de Latinoamérica y el Caribe.