La temporada turística de este año ha provocado una fuerte caída en el empleo del sector de hostelería, y una parte de este descenso se ha debido a expedientes de regulación de empleo (ERE) que se han ido elaborando durante los meses pasados.

Se han presentado 118 ERE este año, según datos del asesor laboral de la Federación Hotelera de Mallorca, Carlos Sedano. La mayoría corresponden a hoteles que se han visto obligados a cerrar sus puertas en otoño e invierno, debido a que el tour operador británico Thomson ha decidido no volar a Mallorca esta temporada baja. Thomson es el gran proveedor de turistas en zonas como Palmanova-Magaluf, y la desaparición de sus clientes esta temporada baja ha aconsejado a algunos empresarios a cerrar sus puertas hasta que se reanude la actividad.

Carlos Sedano indicó que "se han debido negociar cierres temporales" con los trabajadores debido a la nula llegada de huéspedes a los hoteles.

Desde el sector sindical observan que "hay empresarios que han aprovechado la crisis para despedir trabajadores", dijo José García, de UGT Hostelería. "Argumentan causas económicas o productivas para pagar a los trabajadores indemnizaciones de sólo 20 días por año trabajado, pero nosotros reclamamos la improcedencia de los despidos, de tal manera que se debe pagar lo justo, que son 45 días". El asesor de la patronal, Carlos Sedano, señaló que se trata de "casos aislados" y que esta situación corresponde a un numero limitado de regulaciones.

José García indicó que hay zonas que no tienen actividad y citó el caso concreto de las que corresponden a Calvià, donde "hay más hoteles cerrados que nunca". La causa es, además de la espantada de Thomson, que no hay turismo de Imserso. "En cambio la Playa de Palma está en niveles similares a la temporada baja anterior, porque tienen alemanes repetidores y turistas de la tercera edad del Imserso".