Los beneficios que el nuevo modelo de financiación debía conllevar para Balears se han quedado finalmente reducidos a menos de la mitad de las cantidades que se habían estimado inicialmente para 2009 y 2010, según reconoce la conselleria de Hacienda, desde la que se afirma que un error cometido por todas las comunidades autónomas a la hora de calcular la aplicación del nuevo sistema ha conllevado recortes generalizados en las cantidades adicionales a percibir durante estos dos primeros años.

El titular de Economía, Carles Manera, estimó inicialmente que las islas iban a ver incrementada su financiación en unos 350 millones de euros durante el presente ejercicio y en 425 millones en 2010. La realidad ha sido bien distinta, ya que esas cifras van a ser finalmente de unos 160 millones y 210 millones respectivamente.

Esta situación ha generado las correspondientes críticas por parte de los socios de los socialistas en el Pacto, ya que tanto UM como el Bloc ponen de relieve el hecho de que la pérdida de ingresos respecto a lo anunciado ha supuesto "llover sobre mojado", a la vista de la durísima caída que la crisis económica está teniendo en la recaudación autonómica.

Error al calcular el sistema

El error de cálculo se explica porque inicialmente se consideró que el nuevo sistema de financiación se iba a ir aplicando de forma paulatina, de forma que en 2009 se percibiría el 70% de la mejora prevista, el 85% en 2010 y el 100% en 2011, ejercicio este último en que se debía alcanzar la cifra de los 500 millones de euros adicionales anunciados tanto por Manera como por el president balear, Francesc Antich.

Pero el conseller de Economía admite ahora que esos porcentajes sólo se van a aplicar sobre el fondo de competitividad, pero no sobre el conjunto del nuevo sistema, que no entrará en vigor en su totalidad hasta 2011-2012, lo que limita de forma más que considerable las aportaciones reales de este año y el próximo.

Desde Unió Mallorquina y el Bloc se indica que el conseller ya había reconocido en privado que los datos que inicialmente había facilitado estaban equivocados, y que se optó por no dar trascendencia a este tema, más allá de dirigir los ataques contra el Gobierno central sobre las deficiencias que con carácter general se daban en la nueva financiación.

Pero los socios del Pacto advierten de que se puede dar otro problema: Balears cuenta con el compromiso de situarse en la media de la financiación autonómica en 2011, lo que se cifró en la entrada de los 500 millones de euros adicionales antes mencionados una vez se aplique plenamente el nuevo modelo. Pero esa cifra se calculó sin tener en cuenta todavía la durísima caída que el conjunto de las Administraciones está registrando en sus ingresos, tanto la central como las autonómicas.

El riesgo radica en que al reducirse tanto los ingresos, la media en la financiación quede muy por debajo de la cantidad inicialmente señalada, al menos hasta que la actividad económica no se recupere. Según diferentes representantes del Pacto, plantear en estos momentos unos ingresos adicionales de 500 millones de euros no deja de ser una utopía.