La Asociación del Pequeño y Mediano Comercio de Mallorca (Pimeco) ha advertido que las rebajas no serán rentables para los comercios de las islas porque poseen demasiado stock, provocado por la escasez de ventas durante la temporada primavera-verano.

Según explicó ayer en rueda de prensa el secretario general de la patronal, Josep Capó, la temporada no ha cumplido con las expectativas de los comerciantes debido a una disminución en las ventas. Esta recesión ha sido provocada, según la entidad, por una pérdida del poder adquisitivo de los consumidores derivada de la crisis económica, por "el mal tiempo" y por otros factores que han influido en los hábitos de compra. Según la directiva de Pimeco, esta campaña de rebajas conllevará pérdidas para las empresas porque "venderán a un precio rebajado lo que deberían haber vendido en temporada a precio normal". Este problema afecta especialmente a los pequeños comercios, porque "no disponen de grandes almacenes donde guardar el stock como los grandes operadores comerciales".

Ante el problema del excedente de producto almacenado, Pimeco solicitó que se retrasara la fecha de inicio de las rebajas hasta finales de julio para que los comercios tuvieran tiempo de vender a precio normal sus productos, pero el consenso no fue posible y las rebajas empezaron en la fecha que se había previsto, el pasado lunes 7 de julio. "La práctica y la realidad nos demostrará que tenemos razón", afirmó el secretario general.

La dirección de la patronal denunció también que los descuentos anunciados por los comercios de la isla no son reales, sobre todo por parte de las grandes corporaciones. Según Capó, "la diferencia entre el precio anterior y el actual de los productos no es la que aparece en la publicidad".

Pimeco aprovechó para pedir "cautela" a los consumidores y un "consumo responsable", por parte de todos, que tenga en cuenta la "relación calidad-precio" de los productos y el servicio prestado al cliente.