La Conselleria de Vivienda y Obras Públicas invertirá 10,2 millones de euros en la mejora de la seguridad y el ajardinamiento de varias carreteras de las islas, con el objetivo de prevenir accidentes de tráfico y reducir la contaminación acústica y atmosférica, al criticar que estas vías fueron impulsadas en la pasada legislatura "sin las condiciones necesarias por dejadez y falta de previsión".

Así lo expuso hoy el conseller Jaume Carbonero durante la presentación de este proyecto, donde especificó que la cantidad se invertirá en 12 proyectos, diez de ellos de Mallorca, uno de Ibiza y otro de Ciutadella. En concreto, el 65 por ciento del presupuesto (6,65 millones) se invertirá en seguridad mientras que el resto (3,5 millones) se reservará a la adecuación de la jardinería.

Según apuntó, la intención de su departamento es poner en marcha las obras de forma "inmediata", principalmente las de seguridad, para que en noviembre estén ya finalizadas. De este modo, los trabajos que se llevarán a cabo permitirán que el Ejecutivo autonómico traspase estas carreteras a los Consells "en las mejores condiciones".

Así, los proyectos de seguridad se realizarán en varios tramos del eje Palma-Llucmajor (2,4 millones de euros), del eje Palma-Alcúdia (2,1 millones), del de Palma-Sant Llorenç des Cardassar (663.050 euros), diversas carreteras de Ibiza (486.901), ronda de Ciutadella (474.330), tercer carril de la autopista de Inca (354.606) y varias carreteras de la zona norte de Mallorca (99.125 euros).

En este sentido, se instalarán sistemas dirigidos a mejorar la percepción del trazado en situaciones de poca visibilidad e impedir el deslumbramiento en carreteras de dos calzadas, además de reducir los posibles daños en caso de accidente con la instalación de protecciones para los motoristas y sistemas que impidan el cruce de la mediana. Para ello, se colocarán marcas viales sonoras para avisar si los vehículos salen de la mediana, elementos deformables para absorber la fuerza de los impactos y no se añadirán nuevas barreras, excepto en la mediana.

En relación con el ajardinamiento, se pondrán en marcha actuaciones que, desde criterios sostenibles y de respeto medioambiental, prevendrán la erosión de los taludes y la obstrucción de los sistemas de drenaje, al tiempo que reducirán el escurrimiento en caso de lluvias. También permitirán disminuir la contaminación acústica y atmosférica y mejorar la imagen de la carretera y su efecto sobre el paisaje.

En concreto, las zonas en las que se impulsarán estas actuaciones son varios tramos del eje Palma-Llucmajor (2,6 millones), del de Palma-Sant Llorenç (378.213 euros), del de Palma-Alcúdia (231.839), carreteras del norte de Mallorca (156.665) y la autopista central y vía cintura de Palma (199.505). En total, se plantarán 34.380 ejemplares de más de 17 especies de árboles y plantas autóctonas de las islas, que tendrán un coste moderado de mantenimiento, con un sistema que evite su riego una vez arraiguen las distintas especies.

CARRETERAS "SIN MÍNIMOS CRITERIOS DE SOSTENIBILIDAD"

"Si estas carreteras se hubieran construido con unos mínimos criterios de sostenibilidad, no estaríamos hablando de estos proyectos", aseveró Carbonero, quien recriminó que ni siquiera las que costaron más presentaban las medidas de seguridad "necesarias". Así, expresó su confianza en que las iniciativas emprendidas por la Conselleria se extiendan al resto de carreteras con el objetivo de evitar el número de accidentes.

A este respecto, el portavoz de Motoristas de Mallorca, Ricardo Soldevila, afirmó por su parte que los datos sobre siniestralidad en las islas son "muy complejos", por lo que no ofreció cifras, aunque sí destacó que el índice de accidentes ha descendido "muchísimo" en los últimos meses. Por último, señaló que el trabajo "real" de su asociación es concienciar a la Administración sobre la necesidad de disponer de las "mejores" carreteras y "que todo funcione bien".