C uando el sol está de retirada es el momento de subir al terrado del Brick Hotel y disfrutar de la primera copa de la noche. El disco solar se esconde detrás de la Serra de Tramuntana y la brisa nocturna empieza a correr. De fondo, un poco de música: un deep house tranquilo o electrónica suave. Los primeros clientes empiezan a tomar posiciones. Algunos son huéspedes del hotel, otros vecinos del barrio. Entorno a la pequeña barra empieza a haber movimiento: cañas, gin tonics, mojitos o lo que se tercie. No hace falta mucho más.
El verano está a punto de comenzar y ya se respira ese aire de despreocupación. La primera copa, antes o después de cenar en un restaurante cercano. La vista nos ofrece todo el encanto de los tejados de la ciudad y los últimos vestigios del pasado industrial de sa Gerreria. Eso incluye una chimenea de ladrillo destacada en luz roja. Con la llegada de la noche, los pináculos iluminados de Santa Eulàlia, Sant Francesc y la Catedral. Para los que prefieran tocar con los pies en el suelo, el Brick ofrece también su bar y terraza a pie de calle. Desde que abriera el pasado agosto, el Brick Hotel se ha convertido en lugar de referencia del barrio. Con tan solo 11 habitaciones, el Brick se puso en marcha con una filosofía muy clara: ofrecer alojamiento y servicio de bar en el casco antiguo a precios asequibles. Como resultado, un animado punto de encuentro para la gente del barrio de entre veintitantos y cuarenta y muchos.
Brick hotel y bar
Forn den Vila, 3. Palma.
Tel.: 871 031894
Precio Medio: copas, 6 euros
El terrado también puede alquilarse para eventos
