Tiene 18 años, aunque no lo parezca. Ni por su forma de jugar ni por su peso en la rotación de su selección ni por su liderazgo en la pista ni por su desmesurado talento. Es Luka Doncic, base-escolta de 2 metros y pico del Real Madrid y de la selección de Eslovenia, penúltimo escollo este jueves de España en su camino hacia el oro del Eurobasket en Estambul.

Doncic es un jugador de esos que aparece cada varias décadas. Nadie pone en duda que estamos ante el nacimiento de una megaestrella que reinará muy pronto en el universo NBA. El balcánico lo hace todo bien y, sobre todo, muy fácil. La defensa de España deberá tener extremado cuidado con él en una semifinal continental que se presenta durísima.

Eslovenia es descarada, no tiene complejos, juega con un marcado carácter ofensivo y sabe esperar siempre su momento. Está invicta tras siete partidos y eso son palabras mayores.

Pero por encima de Doncic, de los números y de las sensaciones, no debe ser un escollo insalvable para los de Scariolo en su afán por repetir título europeo. Ni siquiera su condición de equipo "revelación" del Eurobasket 2017 le hace ser favorita.

España se medirá ante Eslovenia

España se medirá ante Eslovenia

La selección buscará la final del Eurobasket ante Eslovenia. Vídeo: Agencia ATLAS/Foto EFE

Y es que España es mejor que Eslovenia de aquí a Liubliana. Y no pasa nada por decirlo. Nuestra selección tiene más jugadores determinantes en su róster, más veteranía, más kilómetros en la maleta y, sobre todo, muchos más centímetros bajo los aros para contestar con juego interior y con balones a la pintura a la evidente magia exterior de su dupla de bases en el perímetro Dragic&Doncic.

La perla eslovena es la mayor amenaza para España antes de la finalísima. Pero no la única. Seguro que Dragic y Randolph también querrán ser protagonistas. El espectáculo está garantizado.