Un nutrido grupo de políticos isleños recorrió ayer los principales escenarios de los casos de corrupción políticas de Balears. Participaron en la 'Vía Corrupta', una parodia protagonizada por los periodistas Felip Palou, Antoni Gener, con la colaboración del actor y humorista Xavi Cañellas. Básicamente se pudo ver a representantes de Podem, de Més, de Sobirania per les Illes y algunos del PSOE. Felip Palou indicó que el único partido que declinó participar en el recorrido pedagógico contra la corrupción fue el PP. El argumento esgrimido por los populares fue que "no es el momento de frivolizar con la corrupción". Después, a través de Twitter, el secretario general del PP, Andrés Ferrer, intentó justificar la ausencia de su partido diciendo que no le gustan "los circos".

Juan Pedro Yllanes, cabeza de cartel de Units Podem Més, junto al número tres de esta candidatura, Antoni Verger, fueron de los primeros en llegar al lugar de concentración. Junto a ellos las conselleras del Govern, Fina Santiago y Ruth Mateu, así como la diputada de Més Margalida Capellà. También estaban el diputado de Podem Carlos Saura. Mateu Matas 'Xurí', candidato de Sobirania per les Illes tampoco quiso perderse la parodia de la ruta de la corrupción. Por parte del PSOE estaba el diputado Jaume Garau.

Se inició el recorrido en la antigua sede de Unió Mallorquina, situada en la calle Sindicato, donde se habló de los casos por los que la líder de esta formación, María Antònia Munar, ha terminado en prisión. Desde la compra de votos, pasando por can Domenge y terminando por las "carreteras a la mallorquina" del caso Peaje.

Antoni Janer y Felip Palou relataban los casos de corrupción, en algunas ocasiones comparándolos con las leyendas de la antigua Roma, mientras Xavi Cañellas ponía la nota de humor imitando a Munar, Matas o el mismísimo Gabriel Cañellas.

Los dos periodistas utilizaron como puntero para sus explicaciones una escobilla de inodoro, el utensilio que se hizo famoso la Nochebuena de 2012, cuando la Policia y la Justicia registraron el palacete de Jaume Matas de la calle Sant Feliu y allí encontraron escobillas valoradas en 250 euros.

El inicio de la ruta se pidió a los participantes que explicaran si alguna vez en su vida habían robado alguna cosa. La consellera Fina Santiago relató una anécdota de su niñez, cuando fue a una tienda con su abuela y allí cogió, sin que la vieran, un puñado de arroz para sus juegos de cocina. El otro que se atrevió a relatar su caso de pequeño robo fue Mateu 'Xurí', quien cogió una napolitana de una pastelería cuando la dependienta estaba en la trastienda.

El segundo punto del recorrido fue la plaza de Santa Eulalia, donde explicaron la corrupción de la regida neumática de Palma y después se trasladaron a Cort para hablar del caso de la Policía Local. Todo ello con la introducción informativa y histórica de Palou y Janer y el colofón humorístico con imitaciones incluidas de Cañellas.

El Consell y el Parlament fueron las siguiente estaciones de la 'Vía Corrupta'. En la cámara balear se habló desde el caso Túnel de Sóller, pasando por el Rasputin y terminando por Son Espases y el Caso Nóos.

Como no podía ser de otra forma, la última estación de la 'Vía Corrupta' estaba situada en la calle Sant Feliu. Justo delante del palacete que hasta hace pocos meses era del expresident Jaume Matas y que ha vendido para parar casi 900.000 euros a la Justicia.