Fernando Navarro será diputado en Madrid. El ex gerente del hospital de Inca y ex militante de UPyD logró ayer una silla en el Congreso de los Diputados como cabeza de lista de Ciudadanos en Balears, al lograr 71.240 votos en las islas, casi el triple que en los comicios autonómicos del pasado mes de mayo, cuando cosecharon 25.317 papeletas.

La noche electoral empezó con sosiego en la séptima planta del hotel Saratoga, adornada para la ocasión con globos naranjas amén de una gran foto del líder del partido, Albert Rivera, y se fue animando y ganando en decibelios según iban ganando escaños.

"Hace seis meses no teníamos nada", indicó Navarro refiriéndose a Balears, "y desde mayo hemos triplicado los votos ", señaló el candidato, arropado por el portavoz en el Parlament y cofundador del partido, Xavier Pericay. Navarro tuvo que esperar que a que Rivera hiciera las declaraciones desde Madrid antes de poder dirigirse él a los medios autonómicos -"Órdenes del jefe"-.

En alusión al discurso del "jefe", Navarro se identificó como uno de esos "40 hombres valientes que Ciudadanos tendrá en el Congreso". Quiso quitar hierro al hecho de que las encuestas les aventuraban más escaños: "Que no os engañen las expectativas de hace una semana, 40 diputados es una barbaridad", apuntó, "hemos logrado el objetivo de tener representación en el Congreso".

El ya diputado electo valoró además haber conseguido "romper el monopolio PP-PSOE" y recordó que su partido es un proyecto "de centro y de regeneración" que tiene "el mismo discurso en toda España".

El partido naranja protagonizó una de las incidencias de la jornada electoral en Balears, ya que al poco de cerrarse los colegios trascendía que Podemos, PSIB y Més habían impugnado algunas de las papeletas que habían hecho llegar a domicilio por estar escritas solo en castellano y no en las dos lenguas oficiales como marca la normativa. Pericay aclaró que en cuanto se detectaron estos sobres "irregulares", fueron "inmediatamente retirados". Consideró que estos partidos "pueden impugnar lo que quieran" pero lamentó esta "manera de entender la política".

"Hoy empieza todo", dijo Albert Rivera para concluir su intervención en Madrid. "El trabajo empieza ahora", sentenció Navarro para cerrar su discurso en Palma.