El PIB de la eurozona y de la Unión Europea (UE) mantuvo su crecimiento sin grandes variaciones en el segundo trimestre de 2017, al registrar un aumento del 0,6 % con respecto a los tres primeros meses del año, cuando el alza del indicador en ambas áreas fue del 0,5 %.

De ese modo, la oficina de estadística comunitaria, Eurostat, confirmó hoy el cálculo preliminar publicado el pasado 1 de agosto.

La portavoz de la Comisión Europea (CE) Annika Breidthardt afirmó en su perfil de la red social Twitter que las cifras anunciadas este miércoles son "el indicador positivo más reciente del fuerte impulso del crecimiento".

"El segundo trimestre de 2017 es el decimoséptimo trimestre de expansión del PIB; el tercer trimestre consecutivo de crecimiento del PIB igual o superior al 0,5 % en la eurozona", añadió.

Entre las grandes economías de la eurozona, España fue la que anotó una mayor subida en su producto interior bruto (PIB) durante el segundo trimestre, como ya había ocurrido entre enero y marzo.

El incremento del indicador fue del 0,9 % frente a los tres meses anteriores, tres décimas por encima de la media de la zona del euro y de la del conjunto del club comunitario, aunque solo una décima superior al dato nacional en el primer trimestre.

Mientras tanto, la locomotora alemana experimentó un ligero retroceso en el crecimiento de su PIB, al pasar del 0,7 % en los primeros tres meses de 2017 al 0,6 % entre abril y junio.

Tanto Francia (0,5 %) como Italia (0,4 %) mantuvieron las mismas subidas del PIB que ya habían registrado desde octubre del año pasado.

Entre los países del euro, solo Holanda (1,5 %) y Letonia (1,3 %) superaron el crecimiento de la economía española, mientras que Austria y Chipre (0,9 %) anotaron cifras de crecimiento idénticas a la de España.

En el conjunto del club comunitario, la República Checa (2,3 %), Suecia (1,7 %), Rumanía (1,6 %), Holanda (1,5 %), Letonia (1,3 %) y Polonia (1,1 %) experimentaron crecimientos de la economía superiores a los de España, y Austria, Chipre, Bulgaria y Hungría aumentaron su PIB en un 0,9 %.

Por lo que al Reino Unido se refiere, en plena negociación de las condiciones sobre su futura salida de la Unión Europea, logró un crecimiento del 0,3 %, una décima más que en el primer trimestre.

De un año a otro, la economía española experimentó una subida del 3,1 % entre abril y junio, tras el 3 % de los primeros tres meses del año.

Por tanto, el país también superó la media interanual de la eurozona (2,2 %) y del conjunto del club comunitario (2,3 %).

No obstante, Rumanía (5,7 %), Letonia (4,8 %), la República Checa (4,5 %), Polonia (4,4 %), Lituania y Suecia (3,9 %), Holanda (3,8 %), Bulgaria y Hungría (3,6 %), así como Chipre (3,5 %) rebasaron los datos de crecimiento españoles.

Pese al tímido aumento trimestral de las economías de los Veintiocho y de los países del euro, ambas crecieron al mismo ritmo que Estados Unidos, la primera potencia mundial, cuya subida del PIB desde abril hasta junio también fue del 0,6 %, después de incrementarse en un 0,3 % durante los primeros tres meses de 2017.

En términos interanuales, la economía del país norteamericano creció un 2,1 % en el segundo trimestre del año, menos que la europea.

Para el conjunto del año, la Comisión Europea (CE) pronosticó en mayo un aumento del 1,9 % en el producto interior bruto de la UE, mientras que para la eurozona sería del 1,7 %.

Entonces, Bruselas hizo referencia a las dudas que generan las negociaciones sobre el "brexit" o las políticas económicas y comerciales de Estados Unidos, a las tensiones geopolíticas "en sentido amplio", al ajuste económico de China y a los aspectos derivados de la crisis financiera, como la "fragilidad de ciertos elementos del sector bancario".