La empresa energética española Repsol evitará la emisión a la atmósfera de 100 toneladas diarias de dióxido de azufre con la nueva unidad de generación de combustibles diesel inaugurada hoy en la refinería peruana La Pampilla, la de mayor producción actualmente del país.

La nueva sección dentro de la refinería recibió una inversión por parte de la compañía de 470 millones de dólares y producirá combustibles diesel con menos de 50 partes por millón (ppm) de azufre para adecuarse a la legislación peruana.

La producción de combustibles diesel con bajo contenido en azufre representa la primera parte del proceso de modernización de La Pampilla, que culminará en el segundo semestre de 2018 con la puesta en marcha de una unidad para generar gasolinas bajas en azufre, con una inversión de unos 270 millones de dólares.

La nueva unidad de combustibles diesel aumentará la producción de la refinería en un 15 % hasta alcanzar los 117.000 barriles por día, lo que supone más de la mitad del petróleo que se refina actualmente en Perú.

En el acto inaugural participó el presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski; el ministro peruano de Energía y Minas, Gonzalo Tamayo; el presidente de Repsol, Antonio Brufau; el consejero delegado de la compañía, Josu Jon Imaz, y el director ejecutivo de Repsol Perú, José Manuel Gallego.

Kuczynski destacó que, aunque su Gobierno incentiva la utilización del gas para los vehículos en las ciudades, el diesel es el "principal combustible utilizado por el transporte comercial en Perú".

El mandatario peruano valoró la inversión realizada por la empresa española y afirmó que en los próximos años habrá instalaciones similares en la norteña refinería de Talara, actualmente en un proceso de modernización que contempla una inversión de 3.500 millones de dólares de la estatal Petroperú.

Desarrollo sostenible

Por su parte, Tamayo calificó la nueva unidad de La Pampilla de "hito" porque "por primera vez se producirá en Perú combustibles diesel con menos de 50 ppm" para colaborar así con el desarrollo sostenible y el respeto al medioambiente.

Brufau aseguró que la unidad inaugurada en La Pampilla "llena de orgullo" a Repsol y la tildó como "la más avanzada tecnológicamente" de Perú y la primera en modernidad, complejidad y seguridad de la región.

El presidente de Repsol añadió que la planta también generará valor añadido porque, además de evitar la emisión de gases contaminantes, producirá alrededor de 40 toneladas diarias de azufre que podrán ser utilizadas en procesos agrícolas e industriales.

Agregó que La Pampilla representa el 15 % de la capacidad de destilación del grupo Repsol y consideró a Perú un país "muy importante" para su compañía, donde tiene inversiones por más de 2.400 millones de dólares.

Gallego, por su parte, comentó que los nuevos combustibles diesel producidos en La Pampilla impulsarán la modernización del parque móvil de Perú porque facilitarán la entrada al mercado peruano de vehículos cuyos motores cumplan el estándar Euro IV.

El director ejecutivo de Repsol Perú señaló que la construcción de la nueva unidad de combustibles diesel bajos en azufre se logró sin un solo accidente entre las 2.200 personas que participaron en su ejecución los últimos cuatro años.

La Pampilla, ubicada en la provincia constitucional del Callao, a unos 20 kilómetros al norte de Lima, es la principal refinería de Perú desde que inició sus operaciones hace más de cuarenta años y en 1996 pasó a formar parte del grupo Repsol Perú.

Refinería La Pampilla tiene unos 2.700 accionistas en la Bolsa de Valores de Lima (BVL) y el abastecimiento de sus instalaciones se realiza principalmente con crudos importados de Ecuador, Venezuela, Colombia y Nigeria.