El portavoz del Gobierno griego, Gavriil Sakelaridis, rechazó hoy el ultimátum impuesto por el Eurogrupo y aseguró que "no vamos a solicitar una prórroga del memorando ni con una pistola en la sien".

"El Gobierno no se deja chantajear con ultimátum", dijo Sakelaridis en unas declaraciones a la cadena privada de televisión Mega, en alusión al plazo que ayer dio hasta el viernes el jefe del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, para que Grecia firme una prórroga del acuerdo vigente si quiere seguir recibiendo ayuda de sus socios.

Sakelaridis insistió en que "el Gobierno griego se ha comprometido a un acuerdo mutuamente beneficioso" y que ha demostrado que está buscando "un terreno común para dar una solución común".

Aseguró asimismo que el Ejecutivo heleno continuará con los contactos y las consultas con el objetivo de hallar una solución común.

En términos similares se expresó desde Bruselas el ministro de Finanzas, Yanis Varufakis, quien ya ayer se mostró optimista de que en las "próximas 48 horas" se podrá llegar a un acuerdo.

Grecia se negó ayer a firmar el acuerdo propuesto por el Eurogrupo con el argumento de que mantenía la filosofía del memorando y contravenía el espíritu de un borrador realizado previamente por la Comisión Europea, que, según recalcó Varufakis, hubiera estado dispuesto a firmar "inmediatamente".

En el documento final Grecia debía comprometerse básicamente a cumplir los acuerdos firmados por el Ejecutivo anterior y, sobre todo, a mantener este año el objetivo de un superávit presupuestario del 3 % del Producto Interior Bruto, algo que el Gobierno de Alexis Tsipras quiere reducir a toda costa -en un principio al 1,5 %- para poder aplicar incentivos económicos.

Por otro lado, el portavoz del Gobierno recalcó que no habrá problemas con la financiación de los bancos griegos.

Según Sakelaridis, el Gobierno está en contacto con el Banco Central Europeo y hay garantías de que la financiación continuará sin problemas.