La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Nicolas Sarkozy, pidieron hoy al primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, que acelere las reformas económicas en su país para evitar un agravamiento de la crisis.

Merkel y Sarkozy se vieron hoy en privado con Berlusconi antes del comienzo de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión, según han confirmado fuentes diplomáticas.

Según esas fuentes, la petición transmitida a Berlusconi iría en la línea con el que ayer hizo públicamente Merkel a España e Italia para que asuman mayores esfuerzos y nuevas reformas para reducir su deuda.

Alemania quiere "medidas creíbles y concretas" en toda la zona euro y en el caso de Italia le reclama, específicamente, más reformas en el mercado laboral y de las pensiones.

A la presión sobre Berlusconi se sumó hoy también el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, quien se vio con el primer ministro italiano antes de reunirse con el resto de líderes.

El objetivo de la entrevista, según fuentes comunitarias, era pedir a Roma más decisión en la aplicación de medidas de lucha contra la deuda.

El viernes, fue la Comisión Europea quien pidió a Italia medidas "ambiciosas" de reducción de déficit y nuevas decisiones para relanzar el crecimiento.