­El deterioro de las condiciones del mercado laboral en España está siendo "muy rápido", hasta el punto de que pierde en un año la mejora lograda en ocho ejercicios anteriores, los que coinciden con el período precedente a la crisis financiera, según constata el Índice de Calidad Laboral publicado y elaborado anualmente por el grupo de investigación AQR-IREA de la Universitat de Barcelona para Manpower Professional. Este barómetro se refiere a las políticas de recursos humanos que afectan directamente a los empleados, tales como compensaciones y beneficios, carrera administrativa, diversidad, balance trabajo-tiempo libre, horarios flexibles, salud y bienestar, seguridad laboral, cuidado a sus dependientes, siniestralidad o sueldos, entre otros criterios.

Las condiciones de trabajo retroceden así a los niveles de hace una década, según indica el mencionado informe. También especifica que las comunidades autónomas con mejores condiciones de trabajo son La Rioja (con una índice de calidad laboral de 129,84), Balears (129,38), Aragón (125,53), Cataluña (124,35) y Madrid (124,10). Por el contrario, son Andalucía (109,24), Galicia (111,31) y Canarias (115,57) las que reciben una puntuación menor.

El valor otorgado al indicador en 2001 (que es 100) sirve como referencia para comprobar la evolución del citado indicador. Por sectores, se observa un mayor índice de calidad del trabajo en los servicios financieros a empresas y la industria energética, química y metalúrgica. En el extremo opuesto se encuentran algunas actividades relacionadas con el ámbito de la agricultura, ganadería y pesca, junto con el de comercio y hostelería.

Algunas mejoras

Según el estudio dirigido por el catedrático de la Universitat de Barcelona Jordi Suriñach, la tasa sólo ha registrado mejoras en tres dimensiones: igualdad de género, equilibrio con la vida cotidiana y diálogo social. "Lógicamente -explica este estudio- el primer aspecto en el que se ha registrado una caída a niveles inferiores a 2001 es la inclusión y acceso al mercado de trabajo, que retrocedió un tercio entre 2008 y 2009, a valores claramente inferiores a los del año 2001, hasta situarse en 80,9 puntos". La destrucción de empleo generalizada explica aquel desplome.

La segunda de las diez dimensiones del índice que ha sufrido una regresión por debajo de su punto de partida en 2001 es la flexibilidad y seguridad, que analiza los retrocesos observados en las diferencias salariales entre indefinidos y temporales, el incremento en trabajadores a jornada parcial por no encontrar completa, la caída en los beneficiarios por pensiones asistenciales, así como el incremento en la tasa de cobertura por desempleo.

Las diferencias entre la calidad laboral de los diferentes tamaños empresariales no son abultadas pero aún así son relevantes. La calidad es mayor en grandes empresas que en las pymes y autónomos.

Mientras tanto, sólo tres de cada diez españoles creen que la red de contactos profesionales es clave a la hora de encontrar un trabajo, perdiendo fuerza respecto a épocas anteriores, según una encuesta de Randstad entre casi seiscientos candidatos.

Los españoles dan cada vez más importancia a otros factores, pues cerca del 40% de los encuestados reconoce que la formación, el talento, un buen currículum o la propia entrevista son los elementos clave que determinan el éxito.

LA CIFRA

Talento para tener empleo

El 40% de los encuestados reconoce que la formación, el talento, un buen currículum o la propia entrevista de trabajo son los elementos clave que determinan el éxito dentro de un proceso de selección