El coordinador federal de IU, Cayo Lara, ayer, en una manifestación convocada en Sevilla, que el Gobierno debe salir de la crisis actual con "un giro a la izquierda" y no con leyes como la de Economía Sostenible, que calificó como "ley humo".

Tras una pancarta en la que se afirma que ´El capitalismo es el problema. Hay una salida por la izquierda´, Lara declaró a los periodistas que la ley de Economía Sostenible no supone "ningún cambio" de modelo económico porque carece de recursos y no se dirige a dar empleo a los que carecen de subsidios.

Lara definió a la ley con la frase "parió la montaña y parió un ratón", porque en ella han trabajado "no sé cuántos ministerios" desde mayo "para parir una cosa que no es ningún cambio de modelo económico en este país".

Ante la falta de voluntad del Gobierno por cambiar de verdad el modelo productivo, según Lara, la solución de la crisis pasa "por la movilización popular, por estar en la calle y por presionar con propuestas concretas".

Por ello, dijo que junto a la manifestación, a la que asistieron según la organización 15.000 personas de toda Andalucía, entre ellos representantes de 50 comités de empresas, IU se sumará a la convocada por los sindicatos el 12 de diciembre en Madrid.

En la manifestación, con profusión de banderas de IU, republicanas y del PCE, se mostraron pancartas con lemas como ´la crisis que la paguen los capitalistas´, ´contra el paro, lucha obrera´ o ´los pueblos no aguantamos más, soluciones ya´, y se corearon lemas como ´Zapatero embustero´.

Cayo Lara también reprochó al Gobierno que cometiera una "falacia" con la ley de Economía Sostenible, porque dijo que se aprobaría en un consejo de ministros en Andalucía aunque luego se aprobó en Madrid.

También se quejo de que los presupuestos son "muy cicateros en los recursos", recorta fondos destinados a I+D+i y no busca dinero "donde están, en los bolsillos de los más ricos, de los que han ganado mucho dinero en estos años" y que son "los más poderosos y los que tienen más renta".

El dirigente de IU lamentó que el Gobierno no tiene "voluntad política en perseguir el fraude fiscal" porque, según sus datos, el "25 por ciento del dinero que se mueve no pasa por Hacienda".