El número de bajas en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) creció en España un 44,6 por ciento entre enero y septiembre de 2009 en relación al mismo período de 2007, y ese aumento se dio en todas las comunidades, especialmente en Castilla-La Mancha (un 82 por ciento).

Según un informe de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), en los nueve primeros meses del año 462.399 autónomos se dieron de baja en el RETA, frente a los 319.793 que lo hicieron en el mismo período de 2007, año -en el que según esta Federación- España aún no estaba inmersa en la crisis.

A Castilla-La Mancha le siguen con mayor porcentaje de bajas las comunidades de Murcia (59,9 por ciento), Cantabria (55,9 por ciento), Andalucía (53,5 por ciento), Castilla y León (51,7 por ciento), Extremadura (49,2 por ciento), Madrid (45,9 por ciento), Balears (45,1 por ciento) y Aragón (44,7 por ciento), todas ellas por encima de la media nacional.