El empeoramiento de la balanza comercial se debió principalmente a una caída de las exportaciones en 3.000 millones de dólares con respecto a febrero, mientras que las importaciones disminuyeron en 1.600 millones.

En febrero el déficit comercial sumó 26.100 millones de dólares, tras una ligera revisión al alza divulgada hoy, que aun así lo mantuvo en su nivel más bajo en nueve años.

Desde julio de 2008, los números rojos del sector exterior estadounidense iban a la baja por un menor consumo de los estadounidenses y la caída del precio del petróleo, pero los resultados de marzo interrumpen esta tendencia.

La caída de las exportaciones estadounidenses se reflejó sobre todo en los bienes de capital, de consumo y automóviles, al tiempo que el país también compró menos suministros industriales y bienes de capital del exterior.

El déficit de bienes se incrementó en 1.200 millones de dólares en marzo con respecto al mes anterior y quedó en 38.400 millones.

En los servicios, el otro componente de la balanza comercial, el superávit estadounidense bajó 200 millones de dólares, a 10.800 millones.