El banco detalló hoy que esa cantidad es 3,5 veces superior a los 1.210 millones de dólares ganados en el primer trimestre de 2008 y supone un beneficio por acción de 44 centavos, frente a los 23 centavos de hace un año.

En todo 2008, el banco ganó 4.010 millones de dólares, por lo que los resultados correspondientes al primer trimestre de este año sorprendieron a los analistas, incluso pese a que éstos ya contaban con que las cuentas de la recta inicial de 2009 resultarían algo desvirtuadas debido, entre otros factores, al apoyo recibido desde Washington para que el sector pueda superar la crisis.

Una vez descontados los dividendos correspondientes a las acciones preferentes, entre los que se incluyen 402 millones de dólares pagados al Gobierno estadounidense, el beneficio neto aplicable al resto de los accionistas quedó en 2.814 millones de dólares, frente a los 1.020 millones de un año antes.

El banco explicó antes de la apertura de la Bolsa de Nueva York que en sus cuentas del primer trimestre incluyó por primera vez los resultados de Merrill Lynch, adquirido el 1 de enero de 2009, así como los de Countrywide, comprado el 1 de julio de 2008.

Merrill Lynch contribuyó con una ganancia de 3.700 millones de dólares, una vez excluidos algunos costes de integración, mientras que Countrywide "también aportó beneficios netos, gracias al aumento de la actividad hipotecaria y de refinanciación".

"Haber podido presentar un resultado neto positivo y fuerte durante el trimestre es una noticia enormemente buena dado el contexto", dijo el presidente y consejero delegado del banco, Kenneth Lewis, en un comunicado, en el que sin embargo recordó que la situación sigue siendo "extremadamente difícil" debido al aumento del desempleo y a la debilidad económica.

Los ingresos netos del banco alcanzaron los 35.758 millones, frente a los 17.071 acumulados durante los tres primeros meses de 2008, mientras que las provisiones para hacer frente a posibles impagos de créditos se elevaron hasta los 13,38 millones de dólares, más del doble que hace un año.

Con las cuentas presentadas hoy, Bank of America se convierte en el quinto gran banco estadounidense en anunciar este trimestre unos resultados mejores de lo esperado por los analistas, después de Goldman Sachs, Citigroup, JPMorgan Chase y Wells Fargo.

Aun así, antes de que abriera el mercado, las acciones de Bank of America bajaban el 5,95% y se negociaban en las operaciones electrónicas a menos de 10 dólares cada una. En la sesión del viernes pasado registraron una subida del 2,5% y cerraron a 10,6 dólares.