UGT expresó su preocupación por la pérdida de poder adquisitivo que pueden sufrir los trabajadores a causa de la escalada de la inflación, por lo que insistió en la necesidad de que todos los convenios colectivos contemplen cláusulas de revisión salarial. La organización dirigida por Cándido Méndez subrayó que la inflación no tiene su origen en los costes salariales, sino en el choque energético y en los precios de los alimentos y materias primas en los mercados internacioles. Así, consideró que las llamadas a la moderación salarial que han realizado el Banco Central Europeo y el Banco de España "no tienen sentido".

CCOO reclamó la intervención "urgente y decidida" del Gobierno para que "no se le vaya de las manos" el control de la inflación, centrándose en la evolución de los excedentes empresariales, sobre todo de los sectores menos expuestos a la competencia internacional y de los que actúan en régimen de cuasi monopolio. La organización dirigida por José María Fidalgo subrayó en un comunicado que los empresarios y el Gobierno deben cumplir sus compromisos en materia de control de precios, como los trabajadores cumplen con la evolución de los salarios.