Solbes ha afirmado que el Producto Interior Bruto continuará débil durante algunos trimestres más, para acabar el año con un crecimiento "algo" por debajo del 2%, lo que unido a una tasa de inflación del 4% supondrá con toda probabilidad "un aumento de la tasa de desempleo".
El ministro de Economía ha admitido hoy en los Desayunos Informativos de Europa Press que el crecimiento intertrimestral de la economía española entre abril y junio fue "algo inferior" que el registrado en los tres primeros meses del año, cuando la actividad repuntó un 0,3%, lo que situó la tasa interanual en el 2,7%. De confirmarse este dato, España habría cerrado así su peor mitad de año desde 1995, cuando entre marzo y septiembre su tasa de crecimiento intertrimestral no superó este 0,3%.
No obstante, a pesar del fuerte frenazo que ha sufrido la economía española, que crecía a ritmos del 0,8% y del 3,5% interanual a finales de 2007, Solbes asegura que la recesión (dos trimestres consecutivos con tasas de crecimiento negativo) "no es un elemento de trabajo razonable".
Aún así, consideró posible que la economía española se encuentre en algún momento puntual en una situación de 'estanflación' (estancamiento con inflación), aunque no de forma permanente, al tiempo que aseguró que los bancos centrales están tomando medidas para que esto no se produzca.
DESACELERACION PREVISIBLE
Según Solbes, la desaceleración económica era "previsible" tras una larga etapa de expansión y puesto que España no podía "mantenerse al margen" de las turbulencias financieras que estallaron en EE.UU. el pasado verano y de los "excepcionales repuntes" del crudo, cuyo precio se ha multiplicado por dos en el último año.
Para el vicepresidente económico, estas condiciones internacionales explican la intensificación de la desaceleración económica en España en los últimos meses y, unidas a la desaceleración interna mucho más rápida de lo previsto del sector de la construcción, supondrán "ineludiblemente" un coste para la economía española.
A pesar de todo, el titular de Economía y Hacienda, reiteró que los fundamentos de la economía nacional siguen siendo "sólidos" y que la capacidad de crecimiento no ha variado pese al ajuste, por lo que sigue cercana al 3% a pesar de que la economía crezca menos en los próximos trimestres. Solbes ha mostrado su confianza en que a finales de 2009 comience la reactivación económica en España para alcanzar su potencial de crecimiento en 2010,
Solbes también ha adelantado que la inflación subirá "algún mes más" y finalizará el presente año alrededor del 4%. Un peligroso combinado de precios al alza y escaso crecimiento que, en su opinión, "supondrá un aumento de la tasa de desempleo". Por ello, ha asegurado que cuanto más flexible sea el funcionamiento del mercado laboral, más fácil será la reubicación de los trabajadores. No obstante, ha rechazado que el "mayor problema" del mercado laboral sea la indemnización por despido, por lo que ha descartado una reforma en este sentido.
Respecto a la posibilidad de introducir cambios en la negociación colectiva, Solbes dijo que el Gobierno no puede "imponer ni obligar" a nada en el ámbito salarial privado, pero quiso dejar claro, que el "elemento más grave" que puede sufrir la economía española son los efectos de segunda ronda que lleven a una "espiral de salarios" con un "impacto negativo".
Finalmente, indicó que el sistema de pensiones español funciona bien, pero apuntó que "no conviene bajar la guardia", sino que es importante someterlo a "revisión permanente" porque siempre hay cosas nuevas que se pueden hacer.
