Alejandro Valverde, defendiendo el dorsal número uno y ejerciendo de jefe de filas del Movistar Team, es el principal protagonista de la XXVII edición de la Challenge Volta a Mallorca que empieza hoy en Campos y finalizará el domingo en Palma.
Tras el 'training camp' que inició el pasado domingo en la isla, con la residencia del Rafa Nadal Sports Centre de Manacor como cuartel general, el cuatro años numero uno del ciclismo mundial, pone hoy final a una etapa de siete meses -y más de 200 días- sin competir, tras su caída y las lesiones que sufrió en el prólogo contrarreloj de Dusseldorf, en la última edición del Tour de Francia.
Valverde, quien ha maravillado a sus compañeros de grupeta en su entrenamientos de los últimos meses, ha confesado a sus allegados que llega a la cita mallorquina "con muchas ganas" y también "con nervios", pese a la veteranía y experiencia que le conceden sus 37 años de edad y su trayectoria en el ciclismo profesional.
"Estoy un poco nervioso. No tanto por mi regreso que, sí, reconozco que tengo ganas y que me genera cierta incertidumbre, sino porque me he ido encontrando muy bien en los entrenamientos, con muy buenas sensaciones, pero la competición es otra cosa. Son arranques, cambios de ritmo, velocidades. Tengo ganas de empezar y ver cómo responde mi rodilla, por eso es por lo que estoy nervioso. De forma me encuentro bien y con muchas ganas e ilusión", ha explicado Valverde en una entrevista que concedió en la isla a la web Ciclo21.com.
La organización de la Challenge confirmó ayer la inscripción de Alejandro Valverde para disputar la prueba de hoy, que empezará en Campos, con el pistoletazo de salida programado a las 11:55 horas, y finalizará en Ses Salines, sobre las 16:00 horas.
Como es ya tradición, la característica carrera mallorquina es la encargada de inaugurar el calendario europeo del ciclismo profesional de carretera.
En esta ocasión, entre sus novedades destaca que, ante la nueva normativa de la Unión Ciclista Internacional (UCI), sus 16 equipos participantes solo podrán mantener en carrera por día un grupo máximo de 7 ciclistas.
La Challenge presenta en su programa dos jornadas destinadas a resolverse en meta con un esprint masivo, como ocurre con su prueba de hoy. También la carrera que el domingo concluirá en el Passeig Marítim de Palma.
El Trofeu Serra de Tramuntana, que se disputará mañana, viernes, con cinco puertos de segunda, se presenta muy exigente y como una buena oportunidad para que hombres importantes del pelotón internacional, caso del mismo Alejandro Valverde se prueben y examinen sus condiciones y momento de forma.
También se espera mucho del nuevo Trofeo Lloseta-Andratx, que se disputará el sábado y que en su recorrido, de 175 kilómetros, incluye dos puertos de segunda categoría y un perfil muy quebrado en su segunda mitad.
Protagonistas locales
En la XXVII edición de la Challenge también habrá una importante representación del ciclismo de las islas. Formando parte del nuevo equipo de la Fundación Euskadi debutará como profesional el mallorquín Marc Buades. Y como componentes de la selección española de pista están el menorquín Albert Torres y los mallorquines Xavi Cañellas y el Sub 23 Joan Martí Bennàssar
