El Palma Futsal jugará la Copa de España por quinta vez. Los mallorquines necesitaban un punto para certificar el billete para Madrid y lo consiguieron en un encuentro muy difícil ante el Ríos Renovables y que acabó con empate por 5-5. Los de Vadillo comenzaron ganando, les remontaron, volvieron a adelantarse, otra vez fueron por detrás en el marcador tras una acción arbitral muy discutida y al final empataron a cuarenta segundos del final.

No era un partido nada sencillo porque en juego estaba asegurar la Copa de España para cualquiera de los dos equipos. El gol tardó diecinueve segundos en llegar y lo marcó David Pazos al aprovechar el rechace de David Bernad en un disparo anterior de Maico. Fue la primera acción ofensiva del partido y el Palma Futsal estableció el primer golpe de efecto.

Con el paso de los minutos, el partido se abrió y llegaron las acciones de ataque para los dos bandos sin que ninguno llegase a tener el control del partido. Tanto fue así, que el Ríos Renovables empató el encuentro con un balón en profundidad que remató Richi Felipe casi desde el suelo y que batió a Nico Sarmiento. Error defensivo del Palma Futsal que le costaba el primer tanto del partido.

Estaba en juego el billete para la Copa de España y se notaba sobre la pista. En estas situaciones, la calidad debe desequilibrar y el Palma tiene mucha. Joselito sirvió un pase magistral a Diego Quintela para que el pichichi balear definiera con un toque sutil ante el meta rival. Otra vez tocaba administrar la ventaja en el marcador, pero el equipo de Vadillo volvió a acusar las faltas.

Nano Modrego falló un doble penalti pero no erró el penalti que le señalaron a favor al Ríos Renovables a nueve segundos para el descanso y en el que fue expulsado Lolo al ver segunda tarjeta amarilla por cortar un lanzamiento con la mano. Lo peor estaba por llegar. El Palma Futsal salió tras el descanso con la idea de tener más control sobre el balón y así crear más peligro y, a su vez, evitar el del rival pero el partido se puso cuesta arriba con un gol de Retamar tras una pérdida balear en defensa.

El Zaragoz defendía el resultado con todo lo que tenía, parapetado en su frontal. El dominio era absoluto de los baleares en la pista pero chocaban contra un muro que era el meta rival. Hasta que Joselito encontró el camino para derribar la muralla. Primero lo hizo con un lanzamiento desde la frontal que superó a Bernad y repitió la fórmula dos minutos después con idéntico resultado.

Dos minutos para una remontada que se cortó con la decisión arbitral más polémica del partido. Los colegiados no pitaron una falta clara sobre Eloy Rojas que acabó con gol de Anás. El gol fue un duro golpe para los locales y cortó la reacción balear. Tanto que los visitantes se vieron con vida, se metieron en el partido y marcaron el quinto. Vadillo apostó por Paradynski como portero-jugador para crear superioridad y buscar el gol a la desesperada en los últimos cuatro minutos de encuentro. Costó pero Maico estableció el empate a falta de cuarenta segundos para el final.