El Iberostar Palma se desplaza, hoy, a Barcelona con toda la plantilla a disposición del técnico, Xavi Sastre, por primera vez en lo que va de temporada y con la necesidad de superar al Barça B (18 horas) para acabar con una racha de cuatro derrotas consecutivas. Roger Fornas y Rafa Huertas, que han sufrido pequeños problemas físicos durante la semana, también forman parte de la expedición verdinegra a la Ciudad Condal después de completar los últimos entrenamientos sin problemas.

Esta tarde se vivirá un partido entre dos equipos necesitados de victorias. Ambos se encuentran en la zona baja de la tabla con un balance de dos victorias y cinco derrotas y llegan en rachas negativas. Si el Palma encadena cuatro derrotas, el filial blaugrana lleva tres tropiezos de forma consecutiva. Sastre reconocía en la previa del partido que tenía previsto plantear cambios tácticos de cara al choque de hoy y con vistas a próximos encuentros.

El más significativo es el cambio de rol de Carles Bivià a la posición de escolta para liberarle de defensas a todo campo y tratar de que sufra un menor desgaste físico. Su papel de director de juego lo deberán asumir Sergi Costa y Ben Mockford. Otro de los cambios pensados se encuentra en el trabajo defensivo, una de las máximas preocupaciones del técnico mallorquín.

En busca de una mayor intensidad el entrenador ha trabajado durante la semana un entramado defensivo distinto a los anteriores con el cambio de varias 'normas defensivas'. La vuelta de Tautvydas Slezas también es un alivio para Sastre porque recupera a uno de los jugadores con más dureza en tareas defensivas y que, además, está capacitado para sumar mucho en labores de ataque.

La mayor incógnita será saber qué Barça se encontrará el Iberostar Palma porque se enfrenta a un equipo atípico en el que muchos jugadores ayudan al equipo de la ACB y tira del equipo júnior y cada fin de semana cambia de rostro. Esto hace muy impredecible a la escuadra de Alfred Julbe que, en función de los jugadores a disposición, cambia mucho su rendimiento en cada partido.

Lo que está claro es que el conjunto mallorquín se medirá a un equipo joven con mucho talento y que en cualquier momento puede cambiar el ritmo del partido para bien y para mal a consecuencia de la inexperiencia.